Por su parte, la profesora de carrera académica, Patricia Acosta, fue la encargada de contarles a los asistentes sobre el programa de Gestión y Desarrollo Urbanos, destacando la importancia de profesionales capaces de repensar las ciudades y hacerle frente a sus problemáticas; además, recordó que el programa es el primero en su clase en Colombia y América Latina. Durante el evento, en el que además se hizo el lanzamiento del concurso “Me la juego por Bogotá”, la profesora Acosta mencionó algunas problemáticas que inquietan a la ciudadanía e insistió en que no pueden quedarse en solo quejas, por eso expuso: “todos los que estamos vinculados al programa de Gestión Urbana, queremos contagiarlos sobre la posibilidad de generar cambios por medio de pequeñas acciones; porque el reto es ese, creer que algo se puede hacer”.

En la primera charla el turno fue para “Wheels”, una aplicación móvil gratuita que busca promover el uso sostenible de los medios de transporte, al tiempo que se generan datos sobre las variables que afecten la movilidad de sus usuarios. Al respecto, Wilber Jiménez, co fundador y CEO de la aplicación indicó: “un trabajador en promedio pasa más tiempo en trancones que en vacaciones al año; sumado a que uno de cada seis pesos, alrededor del 17% de los ingresos de personas promedio en las ciudades, va destinado a servicios o bienes de movilidad. Todo esto afecta la productividad de los empleados hasta un 12,5%, y por último la contaminación, pues el 80%, es decir, cuatro de cada cinco partículas contaminantes, son producto del parque automotor. Esto genera que en ciudades como Medellín, las consultas médicas por enfermedades respiratorias hayan aumentado en un 25%”.

La segunda intervención fue la del Padre Wilfredo Grajales Rosas, director del Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y Juventus (IDIPRON), quien compartió su experiencia sobre el trabajo que ha venido desarrollado el Instituto durante 50 años en poblaciones vulnerables. “Un problema debe llevarnos a la solución, tenemos que afrontarlo, de no hacerlo así el daño será mayor. Por eso, se hace necesario no tapar la realidad y por el contrario trabajar por mejorarla, en el Instituto lo hacemos desde tres variables: la primera de ellas es el afecto, porque a uno solo lo puede salvar quien lo ama; la segunda es la libertad, como resorte principal hacia el cambio; es decir, respetar el deseo de salir o entrar de las personas que participan en el programa. Finalmente, buscar alternativas y propuestas alegres para ganarle a lo que la calle le pueda ofrecer a los niños y jóvenes en condición de vulnerabilidad”.

Posteriormente, María Paz Gaviria, directora del Programa ArtBo de la Cámara de Comercio de Bogotá presentó los eventos que se han venido desarrollando durante este año que buscan proyectar a la capital del país como un referente de arte en la región. “El programa está concebido como un proyecto que abarca el mercado, exposición y formación en artes plásticas en la ciudad. En el año 2004 las industrias creativas y culturales fueron identificadas como un sector de alto potencial de desarrollo económico; por eso hoy en día tenemos una apuesta robusta mediante la creación de plataformas como una red de salas ArtBo, ubicadas en Chapinero, Salitre y Kennedy que buscan el fomento de las artes plásticas en los jóvenes bogotanos”.

Por su parte, Catalina Rodríguez, gerente de Artes Plásticas del Instituto Distrital de las Artes (IDARTES), también expuso las iniciativas del Instituto y compartió imágenes sobre los proyectos que lidera. “Se creó la Beca Red Galería Santa Fe, con la cual se buscó fortalecer los espacios emergentes que funcionan en Bogotá desde hace varios años; sumado a esto se crearon proyectos como “Distrito Grafiti” en la localidad de Puente Aranda, y también “Memorias del Futuro”, en el centro de la ciudad. Activando durante dos años 34 espacios como lugares idóneos para la circulación de las artes plásticas en la capital”.

Otra de las iniciativas invitadas al evento fue “Bogotá Cómo Vamos”, programa dirigido por Omar Oróstegui Restrepo, que busca promover la veeduría ciudadana en lo que ha venido trabajando desde el año 2000; además, hace parte de la Red de Ciudades Cómo Vamos. La capital del país ha cambiado en gran magnitud en términos demográficos que son uno de los principales ejes del programa; según Oróstegui: “tener información a la mano permite tomar decisiones y mejores políticas públicas. Dentro de los principales productos que tiene el programa está el Informe de Calidad de Vida, documento anual que es publicado en el primer trimestre de cada año; conjuntamente con la Encuesta de Percepción Ciudadana, que toma en cuenta la opinión de los bogotanos, que permite tener una visión panorámica. Pero, también es necesario hacer veeduría sobre las instituciones, por eso se creó en el año 2002 el programa Concejo Cómo Vamos, cuyo informe es publicado dos veces al año”.

Mónica Villegas Carrasquilla, gerente de Proyectos Sociales de la Fundación Corona – Programa Ciudatos y otra de las ponentes invitadas aseveró: “queremos devolverle el poder al ciudadano, por eso nuestro deseo es democratizar la información”. Asimismo, afirmó que “realmente Colombia está muy rezagada en esto; por ejemplo, en Bogotá según cifras de la Encuesta de Cultura Política del DANE, solo el 16% considera que vivimos en un país democrático y el 58%, se muestra insatisfecho respecto al funcionamiento de la democracia en el país. También, el 15% considera que la alcaldía rindió cuentas, mientras que el 50% de los habitantes de la ciudad cree que el gobierno nunca ha rendido cuentas. Por último, dos de cada diez personas tiene la percepción de que participar no aporta nada a la solución de los problemas de la comunidad”.

En consecuencia, desde hace varios años han surgido iniciativas a nivel mundial que propenden por el acceso eficaz a la información por parte de los individuos y organizaciones, para tomar decisiones de manera adecuada y basados en la evidencia. En consecuencia, es necesaria la creación de alternativas que permita a los ciudadanos enterarse, monitorear y hacer seguimiento a lo que atañe a la sociedad y mejorar así, su relación con los gobiernos.

Finalmente, el profesor del programa de Gestión y Desarrollo Urbanos de la Universidad del Rosario, Alejandro Feged hizo el lanzamiento de la tercera versión del concurso “Me la Juego por Bogotá”, que entrega 2.000.000 COP al ganador de cada una de las tres categorías propuestas. En su versión anterior el premio en categoría universitario fue para Daniel Cifuentes Grueso, estudiante del programa de Ciencia Política y Gobierno y a su iniciativa Ecoinnovo, un proyecto que está cambiando la realidad de una parte de la población del barrio Villa Mercedes, en la comuna 4 de Cazucá, municipio de Soacha, a través del manejo de los residuos plásticos.

Así, el evento en su segunda versión se convierte en un espacio que visibiliza iniciativas tanto independientes y gubernamentales, que le apuestan a un cambio en Bogotá y por supuesto en la manera de estimular a estudiantes de colegios y universidades, así como a cualquier ciudadano a poner en marcha su idea por la ciudad.

#TransformaTuCiudad El objetivo de esta iniciativa fue promover un diálogo constructivo para la innovación social, en el que se plantearon soluciones a diferentes problemáticas sociales, medio ambientales, de transporte y espacio público en las ciudades. Los emprendedores ganadores del concurso Ideópolis en su versión 2018, seleccionados por un grupo de jurados de lujo, fueron:

Categoría junior: equipo Digit Análogos.
Categoría universitarios: equipo Las Cruces.
Categoría ciudadanía: equipo Cerros de Cambio y equipo Compóstame.

En el evento de premiación realizado el pasado 03 de octubre, los asistentes vivieron la experiencia de conocer algunos innovadores sociales y sus proyectos de transformación urbana mediante charlas tipo TED y stands de diversos aliados.

 

El concurso fue creado con el propósito de generar un diálogo de saberes en torno al emprendimiento social urbano y territorial, y la participación ciudadana. Este año se presentaron 38 proyectos para tres diferentes categorías: Junior (colegios), Universitarios y Ciudadanía; de los cuales nueve (tres por categoría) pasaron a la semifinal tras un protocolo de evaluación.

Este último se llevó a cabo el pasado 21 de octubre en el Auditorio Jockey de la Universidad del Rosario, donde se eligió a los tres ganadores de los nueves grupos semifinalistas con proyectos que transforman la ciudad en temas como apropiación de parques barriales, manejo sostenible de residuos, protección del medio ambiente urbano, entre otros.

La prueba final
Para seleccionar a los finalistas de cada categoría, se creó un protocolo de evaluación de semifinalistas, una actividad en la cual los participantes convocados no sabían de la temática a desarrollar, con el fin de probar su destreza y nivel de conocimiento sobre su proyecto. El ejercicio constaba de:

Cada grupo tenía 45 minutos para completar una plantilla de negocio canvas para la gestión estratégica de nuevos modelos de proyectos, en la que responderían a preguntas como: qué propuesta de valor, cuál es el objetivo central del proyecto, cómo se realizarían las alianzas necesarias para su ejecución, quiénes serían sus clientes, entre otras dudas.

Una vez completado el tiempo, cada grupo tenía cinco minutos para exponer su plantilla y aclarar su modelo de negocios. Al final de cada presentación, el jurado tuvo la posibilidad de preguntar a los participantes aspectos muy puntuales de los proyectos.

Al finalizar todas las presentaciones y haber contestado las preguntas de los evaluadores, el jurado se reunió a puerta cerrada para deliberar y escoger al ganador de cada categoría.

En la categoría Junior participaron los jóvenes del Gimnasio Toscana, Gimnasio Los Caobos y el Gimnasio Alessandro Volta; en la de Universitarios estuvieron representadas la Universidad del Rosario, los Andes y el Colegio de Estudios Superiores de Administración (CESA); y en la categoría Ciudadanía, se presentaron los grupos Basura Cero, En-Material y Q-erre X Bogotá.

Vale la pena mencionar que el grupo de jurados estaba conformado por los profesores del programa de GDU: Armando Durán, Fernando Carriazo, Christopher Courtheyn y Simón Uribe; y por representantes del Centro de Emprendimiento de la Universidad del Rosario –grandes aliados del concurso-; Ángela Pulido, Coordinadora de Project Hub, y Margarita Martínez, Profesional Académica de Emprendimiento.

Premiación al cambio de la ciudad
La entrega de premio se dio el 5 de noviembre en el Aula Mutis en el Claustro de la Universidad del Rosario. En este espacio, no solo se dieron a conocer a los ganadores de la versión 2019, sino que también se realizaron charlas tipo TED relacionadas con iniciativas de transformación urbana.

El premio del concurso fue un capital semilla de dos millones de pesos para el desarrollo de un prototipo viable, además de un acompañamiento en términos de asesoría conceptual, empresarial y logístico para ejecutar el proyecto.

"Ha sido muy gratificante y retador escoger a los ganadores de esta quinta versión de Ideópolis", dijo la vicedecana de la Facultad de Ciencia Política, Gobierno y Relaciones Internacionales, Francesca Ramos.
Por su parte, Camilo López, director y cofundador de Vértigo Graffiti, comentó que "el arte urbano desafía el poder y a la definición de una ciudad". Asimismo, Margarita Martínez, coordinadora de Start Factory en la Universidad del Rosario, dio recomendaciones acerca de cómo hacer emprendimiento transformando las ciudades.

Para finalizar la noche de premiación, se anunciaron los ganadores de la quinta versión de Ideópolis según su categoría:

• Junior: proyecto Compactador Doméstico de Residuos C.D.R, por Daniel Lesmes Cantillo y Juan Miguel Manrique Cruz del Gimnasio Los Caobos.
• Universitario: proyecto Punto Verde, por Nicolás Zerda Gallor y Juan Sebastián Torres Figueroa, estudiantes de la Universidad del Rosario.
• Ciudadanía: proyecto En Material, por Andrea Julieth Pava Gómez, Sebastián Trujillo Torres, Michell Nicolás Cifuentes Guerrero, Mónica Yiseth Solanilla López y Diana Rocio Ramírez Rodríguez.
Ha sido tal el éxito de Ideópolis que la Dirección de Regionalización y el pregrado en Gestión y Desarrollo Urbanos, junto con la Cámara de Comercio de Casanare, realizaron un capítulo en la ciudad de Yopal. Un concurso que llevó a la realización de conferencias y a la postulación de proyectos por parte de estudiantes, quienes presentaron propuestas en pro del desarrollo urbano en la región. Sin duda, Ideópolis seguirá trabajando por llegar a las regiones y transformar la calidad de vida en las ciudades.

El pasado 28 de octubre se llevó a cabo la premiación de los mejores proyectos, postulados a esta convocatoria, que buscan transformar las ciudades de Colombia. Eran tres categorías de participación: Junior, Universitarios y Ciudadanía, de las cuales cada una contó con cuatro grupos semifinalistas, quienes expusieron cómo sus proyectos podrían generar cambios en el vivir de la ciudad.

Se recibieron 95 postulaciones de todo el país. Estudiantes de colegios, universidades, y ciudadanos en general, presentaron planes de gran valor para mejorar la calidad de vida en las ciudades. De estas postulaciones, 12 ideas llegaron a la etapa final y 3 se hicieron acreedoras, no solo del reconocimiento y el capital semilla por $2.000.000 COP, sino también del apoyo de la Universidad del Rosario y UR Emprende para el desarrollo de su idea.

En la categoría Junior, ganó Infinitink, un grupo de jóvenes del Colegio San Jorge de Inglaterra que mostró que es posible hacer cambios en la sociedad al reciclar los lapiceros; en la categoría Universitarios, ganó Color Táctico, un proyecto creado por estudiantes de la Universidad del Rosario, que busca generar un cambio de color y sentido a los parques en espacios público de la ciudad; y, finalmente, el equipo CaBog, con una idea que invita a cambiar el “chip” para una eficiente administración de los recursos que no se utilizan, se llevó el premio en la categoría Ciudadanía.

Adicionalmente, el evento contó con la participación de Julio Londoño Paredes, decano de la Facultad de Estudios Internacionales, Políticos y Urbanos, quien reflexionó sobre algunas problemáticas coyunturales que hoy atraviesa el país. En un principio, el Decano Londoño habló sobre el espacio urbano y rural de Colombia y del esfuerzo que han hecho los presidentes para mantener a la población rural en su espacio y así evitar la migración forzosa a las grandes ciudades. Igualmente, mencionó que Colombia no ha tenido una política de migraciones fuerte, a diferencia de países vecinos. Finalmente, felicitó a los participantes del concurso y motivó a todos los asistentes a seguir con sus ideas, “porque las propuestas son fundamentales para salir adelante”, añadió.

Asimismo, se realizaron dos charlas tipo Ted Talks sobre investigaciones que han hecho profesores de la Universidad del Rosario acerca de la COVID-19. La primera charla: “Ciudades sostenibles postcovid-19 casos de Bogotá y Medellín”, estuvo a cargo de Darwin Cortés, profesor de la Facultad de Economía. Durante su intervención, Cortés mencionó un estudio realizado con sus estudiantes de pregrado sobre los distintos problemas que hay en las ciudades de Colombia, donde analizaron diferentes factores con base en tres preguntas: ¿Dónde queremos vivir?, ¿Cómo vamos a vivir? y ¿Qué podemos hacer para mejorar los sitios en que vivimos?

Posteriormente, en referencia al coronavirus, se plantearon interrogantes sobre la construcción de políticas públicas en temas de movilidad y transporte público, sobre seguridad alimentaria (cómo se provisionan de alimentos los colombianos en medio de la pandemia) y la participación ciudadana.


Talleres UR Emprende En el marco del cierre de Ideópolis 2020, el Centro de Emprendimiento de la Universidad del Rosario desarrolló dos talleres de apoyo con el fin de potenciar las ideas de todos los equipos finalistas.

De esta manera, los días 5 y 6 de noviembre, con los mentores de UR Emprende: Massimo Manzoni y Julián Gutiérrez, y junto a las iniciativas finalistas de esta edición, se realizó un espacio donde a través del aprendizaje colaborativo y cooperativo, los equipos finalistas de Ideópolis realizaron un ejercicio de retroalimentación conjunta y autoevaluación. Desde la experiencia de nuestros mentores, se le brindó la oportunidad a cada iniciativa de realizar preguntas e inquietudes alineadas a las necesidades de cada equipo; así mismo, se les brindaron estrategias y recomendaciones para potenciar cada una de las iniciativas. Finalmente, hubo un espacio de networking.
La segunda charla fue importadita por Alejandro Feged, profesor del pregrado en Gestión y Desarrollo Urbanos, quien habló acerca del uso del Big Data para intervenciones urbanas en el marco del COVID-19. Durante esta charla, Feged explicó lo que viene haciendo con su equipo de trabajo usando algunos datos que proporcionan Facebook y entidades privadas y públicas, sobre casos reportados de COVID-19. El profesor mencionó que el objetivo es acercar las políticas públicas a los datos para tomar las mejores decisiones y reducir el impacto de la pandemia.

De igual manera, este proyecto tiene un modelo que le permite unificar los casos para después procesarlos y de ahí hacer el análisis correspondiente. Esto les permite construir un mapa y saber dónde han estado las personas contagiadas por COVID-19.

Finalmente, vale la pena mencionar que los tres equipos ganadores contarán con un incentivo económico y podrán poner en marcha su emprendimiento con la ayuda de la Universidad del Rosario y UR Emprende.

Comenzarán en enero del próximo año en la incubadora Start Factory donde serán asesorados por expertos y profesores de la Universidad del Rosario, quienes les ayudarán a potenciar sus ideas para lograr cambios en la sociedad.

Experiencia ganadores Ideópolis 2020 – Capítulo Nacional

Daniela Arango Pulgarín y Manuel Francisco García Bejarano fueron reconocidos por su trabajo de grado en periodismo, titulado “Hilando tradiciones”, que ocupó el primer lugar en la categoría de Ciencias Sociales en los Premios, dirigido por el profesor Juan Pablo Pieschacón.

Rafael Andrel Mercado Hernández por su tesis de antropología y filosofía, titulada “¿El artista como etnógrafo? Creatividad, novedad y experiencia en las obras de artistas emergentes y de mediana trayectoria en Bogotá” que ocupó el segundo lugar en la categoría de Creatividad y Expresión en artes y letras, dirigido por los profesores Claudia Cortés y Leonardo Ordóñez.

Y finalmente Nataly Alejandra Najera Garzón por su trabajo de grado en sociología, “El cuidado como un universo autocontenido: ética y trabajo del cuidado en mujeres que cuidan a sus esposos con ACV”, que ocupó el tercer lugar en la categoría de Ciencias de la Salud, dirigido por la profesora Claudia Cortés.

Daniela Arango Pulgarín destaca algunos de los aspectos que caracterizó el trabajo que desarrollaron y que lo hizo merecedor de este reconocimiento: “Este proyecto nació con la idea de ser un documental, tiene un componente investigativo bastante fuerte y dedicado, no solamente en términos audiovisuales, sino también en términos académicos. A través de las historias de las personas hablamos de la problemática de la hilandería y nos fuimos enamorando del tema, de los lugares y de la región, su gente, que hizo parte de este proyecto y que lo hizo posible, nos recibió de una manera increíble y permitió que este proyecto, fuera lo que es”

Adicional comenta que “Es un reconocimiento grandioso y muy significativo para nuestra carrera, una motivación para poder continuar trabajando en lo que nos interesa a Manuel y a mí. Este premio no solo es para nosotros, sino en general, para los universitarios del país, un reconocimiento a la labor investigativa y por supuesto, un incentivo muy grande para que sigamos trabajando. Es muy valioso que las universidades reconozcan estos espacios y el trabajo de sus estudiantes”

Por su parte, Rafael Mercado expresa que la importancia personal y profesional que tiene recibir estos premios, es tener una motivación muy grande para seguir investigando: “Considero que el premio en cierta medida se convierte en una la puerta de entrada para que los investigadores o académicos recientes puedan Ingresar en campos ya establecidos o establecer unos propios, en mi caso particular, yo creo que este reconocimiento me sirve demasiado para empezar a hacer pequeños avances en aquello que me interesa tanto sobre la antropología y filosofía del arte”.

También menciona que: “Mi principal motivación para desarrollar este proyecto fue mi gran gusto e interés por las artes plásticas, el cual lo desarrollo desde que me encontraba en el

Colegio. Cuando me gradué del Colegio tenía dos opciones, estudiar artes plásticas o antropología y me decidí por esta segunda opción, sin que esta fuera limitante para no acercarme a la primera ya, que a partir de enfoques como el de la antropología del arte o posteriormente, filosofía del arte, ya que también estudió filosofía, logré vincular este interés que tanto había desarrollado”.

Para la decana de la Escuela de Ciencias Humanas Adriana Alzate, estos reconocimientos son importantes para los estudiantes “El Concurso Nacional Otto de Grieff premia cada año los mejores trabajos de grado universitarios presentados en el área de pregrado, con el fin de estimular la investigación entre los/las jóvenes. Se premian los mejores trabajos que se relacionan con los siguientes temas: ciencias naturales, ciencias sociales, tecnologías apropiadas, desarrollo sostenible y medio ambiente, creatividad y expresión en artes y letras, ciencias de la salud”.

Por su parte, Rafael Mercado expresa que “Si el estudiante confía en su proceso de formación y lo que resulta este en su trabajo de grado, consideró que la participación tanto en concursos, premios, convocatorias, se convierten en un paso fundamental para el desarrollo, tanto personal como profesional. Es en estos espacios donde se descubren otras alternativas y posibilidades, siento que son oportunidades para conocer lo que hay y darse a conocer en el mundo académico y profesional y esto es muy importante”.

De igual forma, Manuel Francisco García comenta que: “Recomendaría a otros estudiantes a participar en este tipo de premios porque es una ventana para que su esfuerzo y su trabajo sean visibilizados. Este tipo de méritos es un reflejo de lo que en un futuro le pueden proponer al campo laboral desde una perspectiva netamente profesional y, de alguna manera, permite dejar un legado. Un nombre en la institución educativa de la que proviene”

Conoce la experiencia de nuestros estudiantes