La jornada inició con la intervención de los rectores de la Universidad de Córdoba y la Universidad del Rosario, respectivamente. Además de contar con la participación de María Paula León, Coordinadora de Proyectos de la Fundación Konrad Adenauer. Ellos se encargaron de hacer un abrebocas para la agenda a trabajar durante el día: el momento crucial en que se encuentra el país y cómo desde la educación -pública y privada- es posible impulsar el desarrollo en la región.
Durante este primer espacio se resaltó la importancia de la participación de la educación superior en las transformaciones del país. Además, se reconoció la educación como el mejor camino para lograr la paz, aspecto que resulta imprescindible en la región cordobesa.
Así, fue posible comenzar a establecer una sinergia entre ambas instituciones de educación superior con un único propósito: reconocer los desafíos de la región con miras al desarrollo. Con esta introducción, se hizo énfasis en el fuerte relacionamiento que las instituciones han tenido desde 2022 y como comprobante del compromiso para seguir fortaleciendo el trabajo conjunto por la construcción de un mejor país, se realizó la firma del convenio entre la Universidad del Rosario y la Universidad de Córdoba por parte de Alejandro Cheyne y Jairo Torres, rectores de las instituciones.
FORO: Diálogo entre la universidad pública y la universidad privada
Este foro tuvo como principal objetivo realizar un análisis a nivel general del departamento de Córdoba, pero enfocándose en la alianza entre la universidad pública y privada. El panel lo abrió Jairo Torres Oviedo, rector de la Universidad de Córdoba. Quien hizo especial énfasis en cómo la ciencia, el saber y el conocimiento son pilares fundamentales en el desarrollo de la sociedad.
“¿Cómo generamos capacidades desde un entorno territorial que permita afrontar problemáticas de todo tipo?” Cuestionó el rector cordobés al plantear cómo las instituciones pueden construir agendas comunes para que las transformaciones que están siendo llevadas a cabo, se integren con la institucionalidad territorial.
Por su parte, el rector de la Universidad del Rosario, afirmó que la sinergia debe enfocarse en los desafíos que se tienen en común, no sólo como instituciones de educación superior sino también como entidades con un propósito en la formación de personas, más allá de sus profesiones, al servicio del país. Así, estableció que una de las preocupaciones principales de estos esfuerzos conjuntos debe ser que la educación superior de alta calidad esté al alcance de todas las personas y no se trate de un tema de privilegios.
La educación al alcance de todos y los modelos de aprendizaje enfocados hacia las necesidades de los jóvenes, fueron las apuestas más ambiciosas que, con el desarrollo del foro, salieron a la luz para las agendas de las instituciones de educación superior.
Como cierre de la primera sesión, el diálogo se enfocó en las necesidades que las reformas deben priorizar. En esta franja, la integralidad del sistema de educación, la paz y un enfoque a cerrar brechas fueron las respuestas.
También se mencionó la violencia, como característica a trabajar en el departamento de Córdoba. En este apartado la importancia de las instituciones de la educación superior se hizo notar, en palabras del rector rosarista “Los jóvenes no creen en la institucionalidad, pero sí creen en las universidades. Porque somos un espacio seguro para los debates y la reflexión.”. Así, se invitó a continuar abriendo estos espacios de diálogo y debate en las universidades.
El segundo panel “Región, desarrollo sostenible y visión social” contó con la participación de Faustina Barroso Herrera, coordinadora promoción y desarrollo Cámara de Comercio de Montería; Orlando Medina Marcilia, director de Corporación Ambiental de los Valles del Sinú y de San Jorge, CVS; Ana Gabriela Carrillo, representante de los estudiantes ante el Consejo Superior de la Universidad de Córdoba y Catalina Pérez, lideresa social.
Las y el experto dialogaron, desde sus puntos de vista, sobre los principales retos que afronta Montería en el proceso de desarrollo. Entre estas problemáticas se hizo un especial énfasis en las brechas entre la academia y el sector privado, la relación con el medio ambiente y el próximo Plan de Organización Territorial de la región, el espacio que los jóvenes ocupan en el mundo laboral y las cicatrices de violencia que persisten en el territorio.
Para abordar estos retos, las y el experto respondieron a la pregunta ‘¿Cómo se imaginan Montería, Córdoba en los próximos años?’. A través de sus respuestas, las miras del departamento se encuentran posicionadas hacia disminuir los niveles de analfabetismo; la alianza entre el sector privado, público, la academia y la comunidad para la construcción de un departamento de vanguardia; las oportunidades de equidad; la paz; el cumplimiento de derechos y la educación para todos.
“Es más fácil mantener a un pueblo ignorante que se puede manipular, que un pueblo estudiado que defiende sus derechos y sus saberes.” afirmó la lideresa social, Catalina Pérez, sintetizando las ideas expuestas.
Finalmente, para darle cierre a la jornada, se plantearon una serie de compromisos que ayudarán a alcanzar la Córdoba soñada. Entre estos, resulta necesario resaltar el empoderamiento femenino en las distintas esferas de poder y toma de decisiones; el fortalecimiento de la educación superior, enfocado a la ampliación de cupos para aquellos estudiantes de municipios aledaños a Montería; el trabajo conjunto del sector privado con la academia, y una gestión especial de cambio climático que permita, a futuro, disminuir los niveles de vulnerabilidad del departamento en materia de erosión e inundación.
Marcela Guardo, estudiante de periodismo.