El conversatorio fue convocado por las universidades del Rosario, Javeriana y Leipzig en Alemania, en alianza con el Instituto Colombo-alemán para La Paz (CAPAZ), la Fundación Alemana para la Investigación Científica (DFG) y la Embajada Alemana en Colombia, con el objetivo de establecer un puente de diálogo entre el gobierno nacional, la academia y líderes comunitarios, de cara a los retos de la paz y la necesaria transformación del campo desde una reforma rural integral en Colombia.
Leonardo Salcedo, investigador de la Universidad de Leipzig, dio un panorama general sobre las condiciones del campo colombiano en el contexto de pandemia, donde la capacidad organizativa y la colectividad de las comunidades locales fueron las que realmente contuvieron los efectos de la pandemia, y no el Estado y sus acciones asistencialistas y de limitación de la movilidad al interior de los territorios.
Es decir, la asociatividad en ciertas veredas, zonas de reserva campesinas, resguardos indígenas y consejos comunitarios de población afrocolombiana, además de reforzar los lazos de solidaridad, mitigó los efectos de la pandemia. Lo anterior, lo confirma la lideresa Paola Rincón cuando asegura que: “Casi siempre se ha logrado algo con la articulación y autogestión de las comunidades y de agencias de cooperación internacionales”.
Las comunidades como eje central de la Paz Total.
Laura Camila Barrios, directora de la Maestría en Conflicto, Memoria y Paz de la Universidad del Rosario, moderó el panel donde participaron Betsy Ruíz, lideresa del Espacio Territorial de Reincorporación de Aguabonita, La Motañita Caquetá; Paola Bolaños, lideresa Zona de Reserva Campesina de Cabrera, Sumapaz; Stefan Peters, director de Capaz; Gabriel Jhon Tobón, profesor de la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales de la Pontificia Universidad Javeriana; y Jairo Baquero, profesor de la Escuela de Ciencias Humanas de la Universidad del Rosario.
En este espacio se habló de cómo “Este proceso de paz total debe ser un proceso integral y no vertical, que las comunidades participemos realmente en la tecnificación y surgimiento del campo colombiano”, señala Betsy, firmante de los acuerdos de paz. Este testimonio está en consonancia con el de Paola Rincón, quien habló desde su experiencia y vivencia en la Zona de Reserva Campesina del Sumapaz, y planteó 5 puntos a tener en cuenta:
1. No hay un mecanismo, una metodología clara de cómo integrar- vincular esa participación de los campesinos y las campesinas.
2. Debe ser un enfoque diferencial y territorial según la zona, no se puede plantear algo uniforme.
3. Incluir el Sistema Nacional de Zonas de Reserva Campesina para articular los recursos desde las instituciones del Estado.
4. Oposición al turismo en estas reservas por tratarse de un ecosistema frágil.
5. Desarrollo rural, turismo y todo lo que se vaya a intervenir en el territorio debe hacerse con los campesinos que habitan estos territorios.
Hacia un nuevo modelo de desarrollo rural
Desde la academia, el profesor de la Escuela de Ciencias Humanas, Jairo Baquero, señala que “la propuesta de este gobierno quiere resolver algo estructural, cambiar el modelo productivo hacia la producción de alimentos y de insumos agronómicos, ahí sí hay giro importante, que por supuesto traerá conflictos y disputas entre los actores”. Una de las disputas que se están dando actualmente es el despojo de tierras, que, de hecho, es denominada por los campesinos como “recuperación-ocupación de tierras”.
Gabriel Jhon Tobón, profesor de la Facultad de Estudios Ambientales y Rurales de la Universidad Javeriana, afirma que el problema de la reforma rural es que está planteada desde el modelo desarrollo neoliberal y por esto, de raíz, no podrá tener el alcance que esperan las comunidades “una de las causas de la situación del campo colombiano es el predominio de un modelo desarrollo rural donde se instrumentaliza el trabajo de la mujer y se depende enormemente del mercado internacional” afirma el profesor Gabriel.
Retos y reflexiones finales de la Paz Total
· Paz total es hablar de acuerdos, y las comunidades tienen un papel fundamental en ello.
· Tras el acuerdo de paz hubo un resurgimiento de fuerzas armadas y disidencias presentándose nuevos actos de asesinatos y rearme.
· No podemos “tomarnos” -refiriéndose a la academia- la voz de las comunidades, somos más bien un vehículo, pues ellas tienen una voz propia y quieren hablar por ellas mismas.
· Hay muchos críticos de este nuevo concepto de “Paz Total” incluso hay quienes hicieron parte de las conversaciones y lideraron el proceso de diálogos con las FARC como Humberto de la Calle, Juan Fernando Cristo.
· Se debe lograr colocar la comunidad en el centro de las decisiones, pues su liderazgo y capacidad de decisión han permitido establecer agendas y exigencias.
· El tema de la reforma agraria no puede ser un tema solo campesino, debe haber enfoques diferenciales ¿Qué papel juega el capítulo étnico en la paz total?
· ¿La paz total si está tomando todos los postulados de la reforma agraria?
· Hay muchos municipios que no fueron priorizados como PDET lo que les afecta en la asignación de recursos.
Si tiene algún aporte o pregunta frente a este tema, escríbanos al correo laurac.barrios@urosario.edu.co
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