Pasar al contenido principal

Ansiedad y comunicación en el aula

Ansiedad y comunicación en el aula
En la vida universitaria podemos encontrar ciertos factores que generan cambios a nivel académico y conductual de los estudiantes. Uno de estos, la ansiedad, es conocida como uno de los factores de riesgo que más predomina en el aula. Y no precisamente ansiedad desde un punto de vista patológico, sino, desde un punto de vista anímico, es decir, la ansiedad como manifestación de alguna situación que se puede evidenciar a partir de signos y síntomas.

Es así como Anaya Nieto (2002), define la ansiedad como una reacción emocional implicada en los procesos de adaptación, al igual que en la autoestima. Es una expresión del miedo, resultado de la percepción de un peligro por parte del sujeto.

 

Ahora bien, es importante mencionar que la comunicación de las emociones es clave para lograr hacer frente a los desafíos emocionales de la vida cotidiana y desafortunadamente, la mayoría de los estudiantes saben cómo hacerlo. En este sentido, es importante saber que la comunicación ya sea verbal o no verbal es uno de los puentes más importantes para construir autodiálogo y relaciones interpersonales que beneficien el bienestar de las personas. "En la vida cotidiana encontramos que la transmisión de mensajes excede con mucho el deseo y la voluntad. En no pocas ocasiones, nuestro cuerpo traiciona la información transmitida a través de la palabra, convirtiéndose en fiel aliado del cerebro más primitivo y emocional “(Isabel Núñez Vázquez & Rafael Crismán Pérez, 2015). Es aquí donde la comunicación no verbal toma un papel fundamental, pues, aunque como personas no queramos evocar palabra alguna para comentar que estamos sintiendo, nuestro cuerpo va a tomar la iniciativa y comenzará lo que se conoce como comunicación emocional.

 

Por otro lado, usualmente en la comunidad estudiantil (estudiantes y profesores) se observan quiebres en la comunicación dentro del aula, lo que en ocasiones genera situaciones de estrés y ansiedad en ambas partes. Para fortalecer lo anterior, vale la pena mencionar 2 de los 5 axiomas de Watzlawick citados por (Ma & Giner, 2012)

  1. Es imposible no comunicar, es decir, sin tener la necesidad de mencionar una palabra, cualquier tipo de conducta o gesto ya es una manera de comunicación
  2. El ser humano se comunica a través de las palabras (comunicación digital) y a través de otros muchos medios no verbales (comunicación analógica). La primera posee una sintaxis lógica y precisión en los significados, sin embargo, aporta poca información en torno a la relación. La segunda es rica en significados relacionales, pero carece de precisión para que el mensaje sea inequívoco. (Ma & Giner, 2012)

En este sentido, la comunicación ya sea verbal o no verbal es una de las herramientas que trae más beneficios frente a situaciones de estrés y ansiedad, pues logra que los individuos generen un apoyo o se apoyen en esos elementos comunicativos claves en cualquier situación. Desde este punto de vista, profesores y estudiantes deben adquirir habilidades comunicativas que les permitan expresar sus emociones frente a diversas situaciones, teniendo en cuenta el uso de estrategias adecuadas para disminuir las situaciones de riesgo, o, en otras palabras, hacer uso de la comunicación verbal o no verbal para así hacer parte de su propio mundo y, explorar la representación mental de lo que están viviendo.

Para conocer más puede consultar en:

 

Muñiz, E. (2012). Comunicación y Salud Mental crecimiento saludable a través del vínculo. Revista Digital de Medicina y Psicosomática y Psicoterapia, 2(3), 1-18.

 

Núñez Vázquez, I., & Crismán Pérez, R. F. (2016). La ansiedad como variable predictora de la autoestima en adolescentes y su influencia en el proceso educativo y en la comunicación. Revista Iberoamericana de Educación.