En forma paralela al concepto de “inteligencia emocional” (de Daniel Goleman), quiero proponer el término “inteligencia civil” para transmitir los comportamientos y actitudes deseables en el individuo para alcanzar una sociedad más pacífica, más civilizada y también más productiva y transparente.
Esto por supuesto facilitará la felicidad que tanto anhelamos los seres humanos y que por tanto tiempo ha sido esquiva para los colombianos. Por eso, propongo el siguiente decálogo :
- Es un derecho, pero también un deber ejercer el voto popular y esto incluye la decisión personal de votar en blanco (si ningún candidato le inspira su confianza o su simpatía).
- Para ejercer el voto popular, es preferible tener en cuenta el beneficio colectivo por encima de los intereses personales. Este acto sin egoísmo permite elegir a los mejores gobernantes para una sociedad (Junta Local, Municipio, Departamento, País). No se deje confundir.
- La decisión de decidir por quién votar (o votar en blanco) es totalmente personal e intransferible : es como la clave personal de una tarjeta bancaria. Siempre conserve su voto limpio, seguro y libre de interferencias indebidas.
- El soborno de cualquier funcionario público (quien lo da y quien lo recibe) no solo es un delito sino que daña la credibilidad del gobierno y pone en peligro a nuestra sociedad. Siempre conserve su billetera y su conciencia limpias, seguras y libres de interferencias indebidas.
- Es una gran falta de respeto por los demás colarse en una fila y también dejar que alguien se cuele. Pero siempre es bonito ceder el paso a un abuelito, a un minusválido, a una mujer embarazada y a los adultos con niños pequeños.
- Es una gran falta de respeto subirse a un bus o a un ascensor sin dejar que antes salgan los pasajeros. Inclusive puede causar heridas a las personas. Haga un esfuerzo y tenga paciencia.
- No es productivo (y además crea mal ambiente) quejarse de los problemas sin proponer soluciones : tanto en el hogar, como en el estudio o trabajo, como en la comunidad. Anímese a crear una solución !
- Quien ejerce un puesto de autoridad siempre merece respeto, así usted no esté de acuerdo con esa persona. Siempre exprese su desacuerdo, pero en forma respetuosa y cortés.
- El ejemplo tiene mucho mas poder que los discursos y las “cantaletas” tanto en el hogar, como en el estudio o trabajo, como en la comunidad. No se deje confundir.
Ser hincha de un equipo deportivo, o simpatizante de un partido político, o miembro de un grupo religioso genera pasión. Pero nunca puede ser una razón para hacerle daño a alguien (o a algo) o poner en riesgo su integridad. No se deje confundir.