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Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario, cuna de la nación colombiana.

MUNUR
A lo largo de la historia los egresados rosaristas han hecho parte de una élite intelectual, activa en los diversos procesos sociales y políticos que han dado vida a nuestra nación.
Alejandro Soler De la Fuente
Redacción Nova et Vetera
    Aporte de los estudiantes rosaristas para la construcción de la nación colombiana.

Durante 365 años al servicio de los colombianos, el Rosario ha sido un actor clave en la consolidación del sentido de pertenencia nacional, una fuente de inspiración para la formación del sistema democrático y un destacado eje intelectual para la transformación social del país.  

A lo largo de la historia los egresados rosaristas han hecho parte de una élite intelectual, activa en los diversos procesos sociales y políticos que han dado vida a nuestra nación.
 
La formación de la estructura político administrativa, la adopción de un sistema democrático republicano, la regulación de la actividad económica, la acción política a través de diversos movimientos estudiantiles y, en años más recientes, la búsqueda de la paz en Colombia, son algunos de los hitos históricos impulsados por el Colegio Mayor mediante su labor educativa.
 
En el siglo XIX, tras la independencia de la Nueva Granada del Imperio Español, la estructuración de un nuevo país fue impulsada por rosaristas, educados en un contexto estudiantil en el que se practicaba una democracia sui géneris, -mediante la elección de sus autoridades por los colegiales- inspirada en las Universidades de Salamanca y de Bolonia, lo cual facilitó la adopción del sistema republicano en la naciente Colombia.
 
Ya en el principio de la Emancipación el pluralismo y la diversidad en el Rosario había dejado una huella en Ignacio Pescador, sacerdote indígena, firmante del Acta de la Independencia. Más tarde el general y doctor Rafael Uribe Uribe y su copartidario el afrodescendiente Luis A. Robles, ambos egresados del Claustro, se destacaron como dirigentes en las luchas políticas que han sido la constante nacional.     
 
En sus casi cuatro siglos de existencia el Rosario ha educado líderes de diferentes ideologías políticas, muestra de la pluralidad de pensamiento y de la educación impartida en el Claustro. Se recuerda como ejemplo la rectoría del doctor Rafael María Carrasquilla, quien durante cuarenta años (1890 -1930), a pesar de ser un decidido defensor y colaborador de la Regeneración de Núñez y Caro, formó en el Rosario alumnos de muy distintas regiones y corrientes políticas, como los hermanos Zuleta Ángel conservadores Antioqueños, los hermanos Lozano y Lozano liberales tolimenses, al igual que Darío Echandía y Antonio Rocha. Así mismo, por la misma época, en las aulas rosaristas estudiaron personajes de tanta trascendencia en la vida nacional como Alberto Lleras, Guillermo Amaya Ramírez, José Antonio Montalvo, José Vicente Combariza “José Mar” y José Francisco Socarrás.
 
Para el siglo XX, numerosos fueron los acontecimientos en los que el Colegio Mayor tuvo participación con sus egresados. “El Rosario fue decisivo en el movimiento estudiantil que desembocó en la caída de Rojas Pinilla, destacándose en dicho momento rosaristas como Diego Uribe Vargas, excanciller, político y embajador; Ricardo Samper Carrizosa, fundador del MOIR”, rememora Luis Enrique Nieto Arango, director de la Unidad de Patrimonio Cultural e Histórico.
 
En los años 90, desde el Rosario se impulsó el movimiento de la Séptima Papeleta, que dio origen a la actual Constitución Política de Colombia de 1991.
En años recientes, la participación estudiantil y la colaboración de las distintas unidades académicas del Rosario han sido fundamentales para la materialización de importantes hitos. Así, el rosario (líder en la realización de modelos de la Organización de Naciones Unidas (ONU) con su modelo MUNUR) asumió el reto de crear el primer comité “MUNUR con Todos” cuyos delegados con discapacidad intelectual representan a este colectivo en su Modelo de simulación de Naciones Unidas. Juan Manuel Montoya, estudiante de jurisprudencia y de ciencia política que se desempeñó como secretario general del MUNUR 2018, asumió el reto de formar a jóvenes con discapacidad intelectual para que participaran en los modelos de Naciones Unidas del Rosario, siendo esta la primera vez en la historia en que asistieron personas con discapacidad intelectual a este tipo de eventos, como lo enunció Juan Manuel Montoya. En los primeros días de noviembre del 2018, cerca de 25 jóvenes con discapacidad intelectual participaron en este evento, demostrando la importancia de generar canales de inclusión para todos los miembros de la sociedad. “De este modo rompemos paradigmas y abordamos temas complejos, mostrando al mundo que es posible generar puntos de encuentro para el desarrollo de habilidades y competencias, con aquellos que estuvieron fuera de estos espacios académicos universitarios en el pasado”, aseguró Naysla Andrea Yauhar, directora de la Dirección de Estudiantes. 
 
Además, la Universidad del Rosario ha venido promoviendo el complejo proceso de paz. Así organizó el Grupo de Estudios Interdisciplinarios sobre Conflicto y Paz (JANUS), un centro de debate para todo lo concerniente con la construcción de la paz en Colombia. “Estos eventos académicos han contado con la participación de panelistas internacionales como el Economista Albert Berry, experto en el tema agrario, defensor de la agricultura en pequeñas extensiones, así como los premios Nobel de Paz Óscar Arias, costarricense que hizo grandes aportes a la paz en Centroamérica y Frederik de Klerk, líder, con Nelson  Mandela de la paz sudafricana”, recuerda el profesor Nieto, quien resalta estos aportes del Rosario para un mejor futuro de todos los colombianos.

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