Los Estados pequeños son actores cruciales en la política mundial, pero han sido tradicionalmente relegados a un segundo plano en la literatura sobre Relaciones Internacionales.

En su libro “A Small State’s Guide to Influence in World Politics”, Tom Long muestra cómo los Estados pequeños identifican oportunidades y desarrollan estrategias efectivas para alcanzar sus objetivos en materia de política exterior. El análisis se centra en el tipo de relaciones que estos Estados construyen.

El autor busca demostrar que, aunque sus condiciones materiales sean más débiles en comparación con las potencias del orden mundial, los Estados pequeños no están condenados a la impotencia o la irrelevancia. Este argumento se desarrolla a partir de diferentes casos de estudio alrededor del mundo que ilustran cómo las cambiantes condiciones globales moldean las oportunidades de los Estados pequeños para influir en la forma de la política internacional contemporánea.