Editorial: Reconstruyendo la historia evolutiva de las serpientes del norte de Suramérica
Edwin Cadena & Andrés Alfonso - Facultad de Ciencias Naturales Grupo de Investigación Paleontología Neotropical Tradicional y Molecular (PaleoNeo).
Dentro de los ecosistemas biodiversos del norte de Suramérica, las serpientes ocupan un rol clave al ser uno de los principales predadores dentro de la cadena alimenticia. Tal es el caso de la famosa Anaconda, que habita gran parte de las regiones de la Amazonía y la Orinoquía. Además de su importancia ecológica, las serpientes han estado ligadas a nuestra cultura desde hace siglos; siendo protagonistas en la cosmogonía de numerosas civilizaciones antiguas, el mundo del cine, juegos de video e incluso ser parte de una de las fobias más comunes.
A pesar de toda la importancia que las serpientes tienen tanto para la ciencia como para la humanidad, muy poco conocemos cómo fue que estos icónicos animales se originaron y diversificaron en el norte de Suramérica. Es por ello, que el Grupo de Investigación en Paleontología Neotropical Tradicional y Molecular (PaleoNeo) de la Facultad de Ciencias Naturales, está liderando una investigación que hace parte de un proyecto de la Maestría en Ciencias Naturales y que busca explorar el registro fósil de las serpientes de Colombia. El cual incluye, la descripción de nuevos especímenes en localidades donde nunca antes los paleontólogos habían encontrado registros de estos vertebrados, y con ello contribuir a entender la historia evolutiva de las serpientes tropicales.
Colectando Fosiles En Socha
La primera de las localidades donde se desarrolla esta investigación, corresponde a la zona árida del norte del departamento del Huila, mejor conocida como el desierto de la Tatacoa. El cual, además de ser reconocido desde el punto de vista turístico, es también un paraíso paleontológico. Allí encontramos nuevos fósiles de serpientes, algunos de ellos con muchas vertebras completamente articuladas y que hacen parte de una revisión detallada tanto de material fósil anteriormente reportado, como de la descripción de los nuevos especímenes que hasta el momento nos indican la ocurrencia de Colombophis; una serpiente semi-fosorial posiblemente emparentada con la actual Anilius scytale y de una gran cantidad de boidos, emparentados con los actuales güios, anacondas y boas arcoíris.
Estas serpientes habitaron nuestro país hace aproximadamente 13 millones de años, tiempo durante el cual el paisaje del norte de Suramérica fue bastante distinto. Para ese entonces las cordilleras tenían una altura menor y había una extensa conexión entre lo que es hoy el Río Magdalena con el Orinoco y el Amazonas, permitiendo la migración de fauna de mamíferos y reptiles (incluido las serpientes).
Econtrando Fosiles En Socha Boyacá
La segunda localidad es nueva para el mundo de la Paleontología de vertebrados de Colombia, esta se encuentra al nororiente del departamento de Boyacá, en el acogedor pueblo de Socha. Allí, las rocas en las cuales encontramos los fósiles de serpientes son más antiguas que en la Tatacoa, al menos unos 56 millones de años; un tiempo conocido en la Geología como Paleoceno. Lo extraordinario de esta nueva localidad, es que encontramos fósiles de la serpiente más grande que ha existido en la historia de la tierra, y que anteriormente solo habíamos hallado en la mina de Carbón del Cerrejón en la Guajira. Las implicaciones ecológicas y taxonómicas de este descubrimiento están aún bajo estudio, y tendrán una gran repercusión en la reconstrucción del paisaje y los ecosistemas que dominaron el norte de Suramérica unos cuantos millones de años después de la extinción de los dinosaurios no avianos.
Nuestra última localidad es un lugar no muy lejos de la ciudad, donde gran parte de los capitalinos disfrutan de un paseo de fin de semana, como lo es la zona de Girardot y Melgar. Los fósiles de serpientes provienen de una localidad cercana a Pubenza, que al ser más joven en términos de tiempo geológico (tan solo unos 16 mil años de antigüedad), es de suma importancia para reconstruir los ambientes de la cuenca del río Bogotá durante el Pleistoceno; y que posiblemente fueron también el escenario para el asentamiento de los primeros pobladores de nuestro país que se tenga registro. Los fósiles de serpientes de Pubenza se suman a una fauna rica también en tortugas, aves, grandes mamíferos como los mastodontes, pero también de animales más pequeños como venados, roedores e incluso el primer registro de nidos de avispa fósiles de nuestro país. Toda esta investigación liderada por el grupo PaleoNeo fue recientemente publicada en la revista internacional Journal of Quaternary Science.
A pesar de que los fósiles que hemos mencionado ayudan a conocer aspectos de la evolución de las serpientes del norte de Suramérica, aún falta mucho más por explorar y aprender de su registro fósil. Seguimos teniendo muchos vacíos en términos de hallazgos, así como algunas franjas del tiempo geológico para las cuales aún no tenemos ni una sola porción de hueso fósil, que nos permita conocer qué animales vivieron en ese entonces y cómo se relacionan o difieren de los ya encontrados. Desafíos que desde el grupo PaleoNeo seguiremos intentando resolver.