Un Niño de la espina
[1], con marco negro y cantoneras doradas de tres quartos
Un quadro en su bastidor sin marco, la Virgen, santa Catharina y santo Domingo
Ocho liensos en sus bastidores, retratos de los de la familia de el señor Manrrique
Un quadro de san Roque sin marco en su bastidor
Otro de la misma forma de santo Thomas de Villanueba
Doz liensoz en sus bastidores, Pintura de Paises de Gregorio Basques
Un lienso de san Xptoval
[2], pintura de Gregorio Basques, de dos varas al parezer
Tres liensos de escudos de armas, en sus bastidores de la casa de el señor Manrrique
Tres liensos grandes en sus bastidores, Pintura de Paises
Dos elementos llaman la atención: Gregorio Vásquez y “pintura de países”. Vamos por partes. “Países” era el término colonial para lo que hoy son “paisajes”. Solo se sabe de la existencia de países en nuestra Colonia por testimonio documental (testamentos, como en el caso presente) y su origen más probable era la importación
[3].
En segundo término, no se conocen países ejecutados por Vásquez. Lo más parecido, en el catálogo de sus obras, es El otoño, sobreviviente de la serie Las cuatro estaciones y “uno de los muy escasos ejemplos de temas no religiosos dentro de la muy extensa obra del maestro”
[4].
[2] San Cristóbal, atribuido a Vásquez, en
Colarte.
[3] Fajardo, M. (2000). Manuel Dositeo Carvajal y el nacimiento del paisaje en Colombia.
Ensayos: Historia y Teoría del Arte, (6), 95–115.
[4] Groot et al. (1963).
Gregorio Vázquez de Arce y Ceballoz. Su vida, su obra, su vigencia. Bogotá: Menorah.