Benjamín Quesada, investigador de la Universidad del Rosario, participó en la elaboración del Reporte Especial sobre Cambio Climático del IPCC.
La tierra tiene fiebre
Benjamín Quesada, investigador de la Universidad del Rosario, participó en la elaboración del Reporte Especial sobre Cambio Climático del IPCC
El calentamiento global es una realidad que sofoca al mundo y “Colombia es vulnerable al cambio climático, particularmente, a eventos extremos como lluvias, sequías y aumento del nivel del mar, pero la deforestación también representa una amenaza creciente para la biodiversidad y la seguridad alimentaria”, afirmó Benjamín Quesada, doctor en climatología y profesor de la Facultad de Ciencias Naturales y Matemáticas de la Universidad del Rosario, uno de los dos autores en Colombia que contribuyeron con la redacción del nuevo Reporte Especial sobre Cambio Climático y Tierras del Panel Intergubernamental en Cambio Climático (IPCC, por su sigla en inglés).
La investigación de Quesada, líder del Grupo de Investigación Interacciones Clima Ecosistemas, consistió en hacer una revisión de literatura sobre ¿cuál es el impacto del cambio de usos del suelo sobre la temperatura global y regional? y analizar ¿cuánto afecta la deforestación a variables climatológicas como ciclo hidrológico, evaporación y vientos? Así como determinar ¿cómo el cambio climático afecta las tierras en términos de seguridad alimentaria?
Los tres mensajes claves de este reporte son:
1) las tierras son vitales, pero están en peligro, no solo por cambio climático sino por deforestación;
2) la deforestación, la degradación y la desertificación de los suelos, están afectando gravemente la seguridad alimentaria y el cambio climático, mientras éste último agrava esta situación afectando negativamente calidad, rendimiento y resiliencia de los cultivos;
3) escenarios realistas de uso responsable y sostenible y adaptación de las tierras constituyen soluciones que puedan mitigar sustancialmente el cambio climático y, a la vez, fortalecer la seguridad alimentaria.
Respecto a este último punto, Quesada indicó que las pérdidas económicas por degradación ambiental ascienden a un 15% del PIB mundial; sin embargo, en Colombia ya existen soluciones que se deben generalizar como la reforestación, conservación de los bosques y la restauración de tierras degradadas como alternativas de mitigación que trae beneficios sociales, ecológicos y económicos.
Efectos sobre Colombia
Los ojos del mundo están puestos en Antártida y Groenlandia, regiones que se están derritiendo a unos ritmos y niveles que superan cualquier modelo de dinámica glaciar, pero esta es una realidad que también se vive en Colombia y que no escapa a la regla. El cambio más visible en el país es el derretimiento glacial que, en menos de 50 años, llevó a perder 8 glaciares y a que al Santa Isabel le quede solo un 8% de la superficie que tenía en 1850.
Según información del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), Colombia pasó de tener 374 km2 a 37 Km2, es decir que ha perdido el 92% de su área glaciar, con el agravante que anualmente se pierde entre un 3% a 5% de lo que queda.
Otros de los efectos y consecuencias que se viven en el país como consecuencia del calentamiento global es el aumento en el nivel del mar, tanto en el Caribe como en el Pacífico, que ocasiona problemas directos de erosión, salinización e inundaciones para las poblaciones del litoral. Asimismo, la elevación de temperaturas en todo el territorio ocasiona el incremento de lluvia en la región Andina y sequias más frecuentes en la Guajira y Amazonía.
Sobre su investigación el profesor Quesada resaltó: “El gran hallazgo es que pudimos cuantificar y ver, cómo ahora, esta deforestación tropical es mucho más dañina para el calentamiento global que en los últimos reportes”. Cuando se cortan árboles en las zonas tropicales es peor que si se hace en cualquier otra parte del mundo, porque esos árboles almacenan más carbono que los de bosque boreal o de zonas templadas. Así, cuando se deforestan emiten mayor dióxido de carbono hacia la atmósfera por las quemas y los desechos de madera que quedan en el suelo tras el proceso, generando gases de efecto invernadero (GEI), explicó.
Pero los efectos adversos no paran aquí, aclara el investigador, pues los estudios demostraron que cuando se cortan árboles en los trópicos, también se corta la capacidad que tiene el suelo para evaporar. Las tierras ya no pueden intercambiar agua y enfriarse, es decir, ya no transpiran como antes y se calientan. Por tanto, al efecto químico de calentamiento se añade uno físico por las nuevas características del suelo deforestado: al suelo le da fiebre.
Efecto químico de la deforestación: + deforestación + dióxido de carbono + calentamiento global
Cobertura y uso de suelos
El sector agrícola es uno de los que tiene más responsabilidad en los impactos ambientales. Participa en dos tercios de las emisiones de gases de efecto invernadero de Colombia que, si bien no es el país más contaminante de América Latina, si ocupa el quinto lugar debido a una dinámica de aumento de GEI de 15 % en 20 años. Asimismo, la expansión de frontera agrícola que se hace a expensas de la naturaleza tiene impactos no solo de deforestación sino de calentamiento global.
El estudio indica que la tala de árboles en Colombia tiene, por lo general, el propósito de introducir ganado, lo cual añade más GEI, pues los eructos de las vacas son altamente contaminantes porque el proceso de fermentación en sus estómagos genera metano, gas que es 25 veces más potente en términos de calentamiento global que el dióxido de carbono CO2. Según la FAO, el ganado es el responsable de 2/3 de las emisiones globales de efecto invernadero y del 78% de las emisiones de metano.
La temperatura de la superficie de la tierra ha aumentado 10C y la huella del calentamiento global se puede sentir hasta tres mil metros de profundidad en los océanos.
La mejor molécula de Co2 es la que no se emite.
El Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), es una organización de las Naciones Unidas, conformada por científicos de todo el mundo y tiene como misión dar una visión objetiva y científica sobre el cambio climático, su impacto y riesgos naturales.
El colapso climático amenaza con causar alteraciones en las cadenas de valor de la alimentación.
Desperdicio de alimentos anual, según la FAO:
En el mundo 1.300 millones de toneladas.
América Latina y Caribe 34% de los alimentos producidos, esto representa 127 millones de toneladas.
En Colombia 9,76 millones de toneladas. Los alimentos desperdiciados en el país alimentaria a 8 millones de personas, aprox.
El curso tuvo una duración de cinco semanas en el que los estudiantes tuvieron la oportunidad de tratar asuntos como: construcción de sexo y género, estereotipos de género, tipos de violencia de género y reglamentación colombiana sobre el tema.
TOP 12 de los resultados más importantes de este nuevo reporte IPCC (vs. Colombia).
1. REPORTE INTERNACIONAL: 125 autores principales y miembros del IPCC provenientes de 45 países, 14.800 comentarios de gobiernos y expertos Colombia: (2 autores de Colombia incluyendo al Prof. Benjamín Quesada).
2. IMPACTO SOBRE CLIMA: El sistema alimentario actual produce 1/3 de las emisiones totales de gases de efecto invernadero (GEI).
3. PÉRDIDA DE ALIMENTOS: se pierde 25-30% de los alimentos mundiales que provocan 8-10% del total de las emisiones antropogénicas. Colombia: Pérdidas de hasta 50% de rubros como mango, yuca y hortalizas de hoja.
4. IMPACTO ALIMENTARIO 1°C extra de calentamiento reduce los rendimientos globales de arroz por 3.2% y el maíz en un 7.4% (áreas de cultivo más importantes después del café en Colombia).
5. IMPACTO NUTRITIVO El contenido de nutrientes de las plantas se ve afectado negativamente por el incremento de CO2: el CO2 en 2050 disminuiría entre un 5% y un 10% en zinc, hierro, proteínas y 13-30% en contenido de vitaminas B (1/2 urbanos, 2/3 rurales y 3/4 indígenas presentan inseguridad alimentaria en Colombia).
6. IMPACTO DEL CAMBIO CLIMÁTICO El cambio climático exacerbará la intensidad de las precipitaciones, las inundaciones, la frecuencia y gravedad de las sequías, el estrés térmico, la erosión, la elevación del nivel del mar y la acción de las olas.
7. MITIGACIÓN CLIMÁTICA POR USO DE LA TIERRA (I) Opciones de mitigación basadas sobre el uso de las tierras podrían proporcionar 1/3 de la mitigación necesaria.
8. MITIGACIÓN CLIMÁTICA POR USO DE LA TIERRA (II) Medidas para el potencial de mitigación del clima 1) Forestación/reforestación 2) Reducción de la degradación forestal, 3) Captura de carbono por bioenergía, 4) Cambio dietético, 5) Reducción de la pérdida de alimentos.
9. DIETA ALIMENTICIA Las dietas bajas en emisiones de carbono son también las más saludables (vegetarianas o flexitarianas).
10. RESTAURACIÓN Cada peso invertido en la restauración de tierras en áreas de tierras secas tiene un rendimiento social de 3 a 6 pesos en un período de 30 años a nivel mundial Colombia: degradación ambiental en Colombia representa pérdidas equivalentes al 3.7% del Producto Interno Bruto.
11. BIOCOMBUSTIBLES “La expansión a gran escala de bioenergía y biocombustibles aumentará la competencia por la tierra y el agua, incluyendo potencialmente las tierras con altas reservas de carbono o con un alto valor de conservación y biodiversidad.” Pueden “dar lugar a un aumento de los precios de los alimentos y a un aumento de la población que corre el riesgo de padecer hambre (…) pueden tener efectos negativos para la seguridad alimentaria”.
12. CONOCIMIENTO TRADICIONAL “Los conocimientos indígenas y los conocimientos locales son importantes para la adaptación de los agricultores, las comunidades basadas en los bosques y los cazadores y recolectores, y pueden ser compatibles con las medidas de mitigación del cambio climático”.
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