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Reseña a un libro histórico

Jairo Hernán Ortega Ortega, M.D

Cirugía hepatobiliar en Colombia - Editorial UR

Todo lo verdaderamente grande pertenece a la humanidad entera.
Emil Ludwig.

Perspectiva para no olvidar la historia, es el subtítulo del libro Cirugía hepatobiliar en Colombia (1), escrito por el Dr. Gustavo Adolfo Quintero Hernández, apenas acabado de salir de impresión para la reciente Feria del Libro de Bogotá. Huele a nuevo (nova) y también, por mucho de su contenido, a viejo (vetera), a antiguo, a historia; cumpliendo a cabalidad los parámetros y preceptos del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario.

Y es que en el Dr. Quintero Hernández, actual Decano de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universidad del Rosario, se encarna el Rosarismo puro, académico y pasional, con el que demuestra todo su amor al alma mater. Se hizo Doctor en Medicina y Cirugía en el Claustro y optó por especializarse en Cirugía General, también en el Rosario, bajo la tutela de los franceses pabellones del Hospital de San José regidos por la Sociedad de Cirugía de Bogotá.

Su inquietud intelectual y su habilidad quirúrgica lo llevan a realizar su ejercicio profesional en connotados centros hospitalarios del país y a completar su formación académica en supra especialidades allanadas con el mayor de los éxitos allende nuestras fronteras. De eso y mucho más, escribe el Dr. Quintero Hernández en su nuevo libro y es de lo que, después de haberlo devorado sin pausa, aquí les contaré.

Dos cosas me impactaron de entrada: la imagen de la cubierta y el epígrafe que escogió para iniciar su relato. Pues resulta que la portada es la imagen gráfica de una pintura, al óleo sobre tela, llamada Trasplante hepático. Pocos se imaginarán quién es el autor de la obra. Pues es el mismísimo Dr. Gustavo Quintero. Lo segundo, el epígrafe, es el último verso de la Oda al hígado, la cual no tenía ni remota idea de que existiera, y cuyo autor es, ni más ni menos, que el vate chileno, y premio Nobel de Literatura, Ricardo Eliécer Neftalí Reyes Basoalto, más conocido como Pablo Neruda. Esas y muchas otras sorpresas se encuentran en este histórico y necesario libro.

El prólogo lo desarrolla, con vívida intensidad, el Dr. Alonso Vera Torres, quien en la actualidad es el Jefe del Servicio de Trasplantes y Cirugía Hepatobiliar de la Fundación Santa Fe de Bogotá. Es el testimonio del alumno que recibió la posta de manos del autor. Relata cómo fue testigo, de excepción, del desarrollo vertiginoso de esa gesta forjada con “ejemplo de disciplina, rigor y estudio” de su “profesor y mentor” el Dr. Quintero Hernández, bajo el impulso, olfato y ojo avizor, cual Horus, de otro grande y único de la Medicina colombiana, el Dr. José Félix Patiño Restrepo, a quien el profesor Quintero considera la figura más prominente de la cirugía colombiana. Y recuerda el Dr. Vera Torres, que trabajó dentro del proceso histórico de la cirugía de trasplantes en Colombia al seguir a su mentor y también a quienes en el mundo le enseñaron a él. Sin darse cuenta estaba siendo parte de esa historia. Además, resalta que el “profesor Quintero educó a una gran generación de médicos para que esa historia fuera completa y duradera”. Culmina su sabroso y sentido prólogo informando que el procedimiento de Trasplante Hepático es reconocido como la máxima expresión de arrojo, conocimiento y habilidad en cirugía hasta el momento, con la fortuna, para él y otros de que, en estos menesteres, “no se hicieron solos”; por lo que termina agradeciendo al maestro Gustavo Quintero haber escrito el libro ya que “¡La historia que no se escribe se olvida!” Siente uno que, de verdad, son unas palabras introductorias plenas de admiración y mucho cariño hacia su maestro.

El Dr. Gustavo Adolfo Quintero Hernández, como en todo lo que hace y ha hecho, no improvisó con esta obra, pues ya la venía concibiendo desde hace dieciséis años, justo cuando expuso los pininos de esta ante el plenum de la Academia Nacional de Medicina.  Empieza a llevarnos, a través de un fabuloso paseo histórico, sobre lo que el hígado representaba en la mitología con la tragedia de Prometeo, que la litiasis biliar ya estaba documentada en el antiquísimo Papiro de Ebers y que Galeno lo consideraba “órgano central de la vida vegetativa”; que para el siglo XV Vesalius estableció la relación entre cálculos de la vesícula, ictericia y enfermedad. Descubre, para quienes fuimos formados por jesuitas, que un cálculo en la vía biliar llevó a la muerte al fundador de la Compañía de Jesús. Y, algo macondiano, que en el museo de la Academia Nacional de Medicina reposa el cálculo biliar que llevó al lecho de muerte al general Francisco de Paula Santander, héroe de nuestra independencia. Lo fantástico de todo esto será cuando lean cómo y porqué el Dr. Quintero paseó con ese cálculo en su bolsillo por toda Suramérica.

Para quienes se deleitan con la historia de la medicina, podrán conocer la relación de las enfermedades hepatobiliares con el creador de la cirugía moderna, el Dr. William S. Halsted y lo que en el mismo sentido aconteció con su madre. También, lo que Paracelso, Falopio, Galeno, Schenk, Simpson, Pujol, Morgagni y otros, tuvieron que ver con la materia en cuestión. Ahí está escrito de manera magistral. Incluye cómo surgieron procedimientos como la colecistolitotomía, la colecistostomía, la coledocotomía, la colecistectomía, la exploración de vías biliares, la colecistografía, la colangiografía intraoperatoria. Ahí está plasmado de forma exquisita. De igual modo documenta técnicas y dispositivos como la coledocoscopia, los fórceps de Mazzarielo, la colangiomanometría, el Fogarty, la canastilla de Dormia, la aguja de Chiba, la ecografía, la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica (CPRE), hasta llegar a dilucidar quién, en el mundo, fue quien realizó la primera Colcistectomía por Laparosocopia, dando pie a la revolución de la cirugía mínimamente invasiva, la cual considero que, en algún momento, será galardonada con el premio Nobel de Medicina (2). Todo eso lo podrá leer, saboreando un café, en el libro Cirugía hepatobiliar en Colombia.

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Dr. Gustavo Adolfo Quintero - Foto Méderi

El libro, de la pluma del Dr. Gustavo Quintero, nos muestra también gran parte del desarrollo de la Cirugía General y Hepatobiliar en Colombia, la cual divide en tres grandes períodos: de 1903 a 1945, de 1946 a 1986 y de 1987 hasta la actualidad. Por allí desfilan una pléyade de habilidosos y connotados Cirujanos, como, entre muchos otros, los profesores Pompilio Martínez, Juan N. Corpas, Pedro Eliseo Cruz, Hernando Anzola Cubides, Alfonso Bonilla Naar, Ernesto Andrade Valderrama, Jorge Segura Vargas, Alberto Escallón Azcuénaga, Álvaro Caro. Destaca a quienes fueron sus mentores, los Drs. Mario Negret López, Juan di Doménico, Antonio Ramírez Sánchez, a quienes reconoce como “desarrolladores de talentos”.

Nos descubre intríngulis de hospitales como el San José, donde desarrollaban extraordinarios trabajos de investigación en las patologías del hígado y las vías biliares, pero con el agravante que la mayoría no llegaron a publicarse, tanto así que el Dr. Quintero Hernández tan solo tiene una única publicación con el Dr. Negret. Para 1984, escribe: “…viajé al Reino Unido con el objetivo de adelantar estudios en microbiología médica en la Universidad de Londres – London Hospital Medical College – y una finalidad subsecuente: capacitarnos en cirugía hepatobiliar y y trasplante en la Universidad de Birmingham – Queen Elizabeth Hospital – con el profesor Paul McMaster”. Su periplo europeo y la relación con el maestro McMaster, con sir Roy Calne, con el profesor Elwyn Elias, con sus compañeros Laura Buist (Escocia), Samy Sadek (Egipto), Ian Michell (Australia) y Giovanni Tisone (Italia), es un capítulo para no perderse porque él, dentro de esos cirujanos extranjeros, era el único y primero latinoamericano. Y el relato es imperdible hasta que arriba a la Fundación Santa Fe de Bogotá donde realiza el primer trasplante de hígado en la historia de la capital colombiana. Como afirma el Dr. Alonso Vera, de la mano del Dr, Quintero alcanzaron, entre muchos, logros como el primer trasplante hepático en Colombia con donante con hígado dividido y uno de los primeros en Latinoamérica; de igual modo el trasplante hepático que más ha sobrevivido en Colombia (más de 30 años). Todo lo anterior, siempre resaltando el equipo multidisciplinario que los acompañó y respaldó. De ahí el éxito.

Los estudiantes de medicina, los médicos, los cirujanos o los especialistas en trasplante que deseen conocer sobre los pioneros de los trasplantes de hígado en el mundo y en Colombia, la primera litotricia ultrasónica para colelitiasis, quién ideó la colangiografía laparoscópica, las indicaciones de colecistectomía electiva, la solución a las estenosis o lesiones de la vía biliar, la técnica ideada por Chen en China, quiénes realizaron las primeras colecistectomías por laparoscopia en nuestro país, la pancreatectomía laparoscópica y avances como la ecografía endoscópica, la ecografía laparoscópica, la CPRE y la cirugía hepatobiliar asistida por robot, están obligados a leer este libro que se reseña. Más que obligación será un gusto.
 
Y si se quieren documentar sobre cuándo y quién realizó el primer trasplante exitoso de hígado en el mundo y quién en Colombia, la fecha y características del primer paciente trasplantado de hígado en Bogotá, además de las frustraciones y satisfacciones que puede conllevar esta compleja cirugía, o qué relación tiene un Almirante peruano con los trasplantes de hígado en América Latina, o porqué el hígado es un órgano privilegiado, o qué es el HLA, o la relación del Premio Nobel de Fisiología y  Medicina con los trasplantes, o el desarrollo de la Ciclosporina (que tiene un dato bien anecdótico: su sabor era tan desagradable que venía acompañada de una caja de chocolates suizos para tolerar su ingesta), o quién es el excepcional cirujano del Reino Unido que también es un talentoso pintor al óleo como el Dr. Quintero, pues, repito, si se quieren documentar sobre estos fabulosos tópicos y muchos más sumérjanse en las páginas del libro.

Finalizando su histórica obra, el profesor Quintero toca un tema ineludible: el problema de la donación de órganos. Habla de los aspectos sociales, religiosos, económicos y sobre la legislación al respecto, pero nos recuerda que “donar es el acto de amor más sublime que cualquiera puede tener”, por lo que sigue aplicando el lema “No se lleve sus órganos para el cielo; el cielo sabe que aquí los necesitamos”. Leyendo esto recordé un artículo que escribí, llamado “Somos inmortales” (3) donde hago una paráfrasis diciendo: Para ser feliz, lea un libro, siembre un árbol, tenga un hijo o done un órgano.

Acorde a su innata y generosa vocación docente el maestro Quintero plasma en su investigación histórica una copiosa y valiosa bibliografía que es un verdadero tesoro para legos, profanos o cultos. No contento con todo ese enorme contenido, en el último capítulo intitulado “Regresando al futuro”, nos habla de una hipótesis extraordinaria, relacionada con el microbioma, donde casi vaticina, con fundamentación científica, que la etiología de la formación de los cálculos biliares se relaciona con la flora bacteriana biliar. Algo así como lo encontrado con el Helicobacter pylori y el desarrollo de patologías gástricas. Entonces, si se controla y trata el microbioma biliar lo que sucederá es que, en tiempos venideros, los cirujanos ya no operaremos más vesículas por causa de cálculos. Vaya paradojas y sorpresas, tal como él me lo advirtió, las que nos trae este libro.

Qué grato es saber que la historia de la Cirugía hepatobiliar en Colombia la estamos leyendo a través del legado escrito por uno de sus más grandes protagonistas, el Dr. Gustavo Adolfo Quintero Hernández, quien con esto se constituye, para la Historia de la Cirugía en la Universidad del Rosario y del país, en una verdadera leyenda viva. No resta sino agradecerle.

Referencias bibliográficas

  1. Quintero GA. Cirugía hepatobiliar en Colombia. Perspectiva para no olvidar la historia. Bogotá, D.C.: Editorial Universidad del Rosario; 2021.
  2. https://www.urosario.edu.co/Revista-Nova-Et-Vetera/Vol-3-Ed-34/Columnistas/El-proximo-Premio-Nobel-de-Medicina/ 
  3. https://www.urosario.edu.co/revista-nova-et-vetera/Inicio/Columnistas/Somos-inmortales/

 

Fe de erratas
En el artículo que publiqué en esta misma revista, el pasado mes de julio, llamado “Justicia por mano propia”, no figuró la bibliografía de este, la cual cito a continuación:

  1. https://www.urosario.edu.co/Blog-Archivo-Historico/Cronica-rosarista/Abril-2016/El-tomismo-en-el-Rosario-I-la-protesta-de-un-cated/
  2. QUEVEDO V., Emilio. De la restauración de los estudios de medicina en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario 1965 – 1969 / Emilio Quevedo V. y Juliana Pérez G.. – Centro de Investigaciones, Estudios y Consultoría. Bogotá: Editorial Universidad del Rosario, 2009. 488 p.
  3. http://www.grupofergusson.org/wp-content/uploads/2018/05/EL-MAESTRO-GUILLERMO-FERGUSSON-1928-1978-VF.pptx