Una copia de la primera edición de los Principia de Newton fue encontrada por Vannina Schirinsky-Schikhmatoff, directora de conservación de la biblioteca del patrimonio público de Fesch, en Ajaccio (Córcega). La funcionaria se encontró con la obra mientras examinaba un índice creado por Lucien Bonaparte, fundador de la biblioteca y hermano de Napoleón. El “santo grial”, como lo llama Schirinsky-Schikhmatoff, y “piedra angular de las matemáticas modernas” se halla en buen estado, excepto por un daño en la cubierta.