Por: Alejandra Palacios
Gestora de comunicaciones – Dirección de Comunicaciones y Reputación Institucional
Este concepto surgió en 2005 como parte de una campaña publicitaria, cuando el psicólogo británico Cliff Arnall propuso una fórmula que combinaba factores como el clima, las deudas acumuladas tras las fiestas, la motivación decreciente y el incumplimiento de los propósitos de Año Nuevo.
“Posterior al periodo de vacaciones algunas personas suelen experimentar tristeza, malestar o algunas emociones negativas en su regreso al trabajo. Esta experiencia es algo que puede durar por algunos días o hasta un par de semanas. Varias son las posibles causas de este malestar post-vacacional, donde en algunos casos, se relaciona con la pérdida de las rutinas o hábitos que se tenía antes del periodo de descanso; para otras personas se asocia con el retorno a su trabajo y la exposición a los estresores laborales (conflictos con compañeros o jefes, acoso laboral, escaso reconocimiento y poca autonomía, entre otras); también puede existir alguna preocupación sobre todas las tareas pendientes y el trabajo represado”, afirma Juan Gabriel Ocampo Palacio, profesor y Director del programa de Psicología de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud.
Si bien no tiene base científica, este día ha cobrado relevancia en la cultura popular, convirtiéndose en un recordatorio de que el bienestar emocional merece atención. A pesar de su origen publicitario, el Blue Monday sirve como excusa perfecta para reflexionar sobre nuestro estado emocional y buscar formas de cuidar nuestra salud mental.
“Esta experiencia es algo que puede durar por algunos días o hasta un par de semanas. Varias son las posibles causas de este malestar post-vacacional”, afirma Juan Gabriel Ocampo Palacio, profesor y Director del programa de Psicología de la Escuela de Medicina y Ciencias de la Salud
A continuación, desde la Decanatura del Medio Universitario te compartimos cinco consejos prácticos para transformar un “blue monday” o cualquier día difícil en un día más llevadero y positivo:
Cinco consejos para hacer del Blue Monday un mejor día
- Planifica algo que te emocione
Rompe la rutina y dedica tiempo a una actividad que disfrutes, como salir a caminar, cocinar tu comida favorita o empezar un libro nuevo. Tener algo que esperar con ilusión puede cambiar tu perspectiva del día. - Cuida tu alimentación y ejercicio
El bienestar físico influye directamente en el estado emocional. Opta por alimentos que te llenen de energía, como frutas, vegetales y proteínas, y si puedes, realiza alguna actividad física, aunque sea un breve paseo al aire libre. - Conéctate con tus seres queridos
Una conversación con un amigo o familiar puede alegrarte el día. Compartir tus sentimientos y escuchar a otros puede ser reconfortante y darte una nueva perspectiva. - Sé amable contigo mismo
Si sientes tristeza o falta de motivación, no te culpes. Reconoce tus emociones y date permiso para descansar o tomarte un respiro. Practicar la autocompasión es clave para el bienestar. - Haz algo por alguien más
Ayudar a otra persona, ya sea con un gesto pequeño como enviar un mensaje de ánimo o participar en actividades solidarias, puede aumentar tu sensación de propósito y felicidad.
Aunque el Blue Monday pueda parecer un concepto creado para atraer atención, lo importante es aprovecharlo para reflexionar sobre nuestras emociones y buscar formas de cuidarnos mejor, no solo este lunes, sino todos los días del año.
