Sin lugar a duda, el 2020 fue un año lleno de avatares.

Para muchos, el peor de la historia reciente, pues los hechos que se desarrollaron en este periodo de tiempo tuvieron un carácter casi apocalíptico: desastres naturales, inestabilidad política, acciones militares a gran escala y, por supuesto, una pandemia. Todos estos hechos recogidos en nuestros números de ese año y analizados desde diferentes perspectivas.

De todo esto, fue la llegada del SARS-Covid2 la que más afectó la vida de la humanidad en completo. De un momento a otro vimos nuestras libertades restringidas, nuestras rutinas alteradas y nuestra tranquilidad hecha añicos en aras de algo que, para muchos, no contaba como una preocupación cotidiana: sobrevivir. Y es que, aunque la enfermedad sea una condición que nos acompaña todos los días, hacía decenios que no nos enfrentábamos a una que nos amenazara como especie y habíamos olvidado la angustia y el miedo que esto produce.

Sin embargo, estas calamidades llevaron a cosas nuevas, muchas de ellas benéficas, y ya vemos la luz al final del túnel, aunque sea un túnel muy largo. Esta pandemia ha mostrado que el avance científico y tecnológico puede significar la diferencia entre la existencia y la extinción, que el trabajo común entre Estados e individuos es vital para nuestra supervivencia, que nuestro modelo productivo está condenado a desaparecer si queremos sobrevivir como especie, que trabajos que antes denigrábamos o subvalorábamos son los que mantienen a nuestra sociedad andando. En últimas, nos ha recordado que somos más que trabajo y dinero, que somos humanos.

 

Esto nos trae a un 2021 lleno de perspectivas y retos, que desde la Revista del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario -Nova et Vetera- estamos dispuestos a asumir y aprovechar. Tras la partida de nuestro director, el Dr. Luis Enrique Nieto (Q.E.P.D), nos hemos enfrentado a una serie de reformas y reestructuraciones que nos permitirán continuar con su legado y con el de Monseñor Carrasquilla, quien fundó la Revista por allá en 1905.

Y así, en este mundo virtualizado, seguiremos con nuestra labor de divulgar el conocimiento, con la participación de un nuevo Comité Editorial, conformado por académicos y expertos en distintos temas de nuestra Universidad. Así mismo, algunos de nuestros columnistas permanentes, a quienes agradecemos sus años de dedicación, cumplieron su ciclo con nosotros y serán precedidos por nuevas plumas, cuyos nombres revelaremos en poco tiempo, quienes darán frescura a nuestra publicación y nos permitirán llegar a aún más gente.

Encaramos de esta manera este nuevo año, con la intención de continuar mejorando y creciendo. Con la idea de ser la mejor publicación institucional universitaria de Colombia. Por esto, en el 2021 invitamos a rosaristas y miembros de la comunidad en general a participar en nuestra publicación, ya sea como lectores o como escritores, y hagan parte de un proyecto que cumple 116 años de historia, compaginando lo nuevo y lo antiguo o, como dice nuestro lema, Nova et Vetera.