“La mejor noticia no es siempre la que se da primero,
si no, muchas veces, la que se da mejor”
Gabriel García Márquez

Esta columna es producto de un intercambio twittelar (léase epistolar vía Twitter). Debido a acontecimientos acaecidos a principios del mes de julio, en la isla caribeña de Haití, donde se vieron involucrados militares colombianos, le respondí un Twitter a la periodista Vicky Dávila expresándole que no estaba de acuerdo con lo que ella informaba sobre lo sucedido. Mi sorpresa fue grande y grata al ver que ella, por vía directa, se comunicó conmigo a través de la red arriba mencionada esto es lo que da pie al presente artículo.
 
El intercambio twittelar se desarrolló de la siguiente manera (14 de julio de 2021):
Doctor, un saludo. Veo su mensaje. Cuéntame por favor qué inventé sobre el magnicidio de Haití. Me atrevo a escribirle porque siento que quizás podamos hablar y aclarar sus dudas. Con todo gusto Vicky, buenas noches primero que todo agradezco su deferencia. Desde un principio usted argumentó que los militares colombianos fueron contratados para seguridad del presidente y que llegaron después de lo sucedido. Además, que ellos ayudaron a la primera dama. En verdad el sabor que me dejaron sus informes fue el de querer defender a los militares colombianos, a como diera lugar. Hoy se aclaran muchos hechos y espero su verdad de periodista. Muchas gracias Doctor, comprendo sus dudas. Pero quiero que tenga claro que no fui yo, en ese momento, tras la noticia; esa fue la información que entregaron las familias con grabaciones y todo. Hoy que se dio una confesión, Semana fue la primera que lo contó Entiendo Vicky, es como cuando una ópera un herido y va resolviendo muchas cosas y de pronto la más grave lo encuentra al final de la cirugía. Yo no tengo interés alguno en defender a nadie. Como usted repudio lo que hicieron, pero comprenderá que en algo tan delicado la verdad va surgiendo poco a poco. Por eso le escribí. porque creo que con usted puedo hablar con respeto. Yo respeto muchísimo el trabajo de los médicos mi esposo es médico y los valoro inmensamente. Espero que me crea lo que digo porque es la verdad. La reportería es así.

Admiro la labor del periodismo, pero a veces, cuando se sale de los cánones se cruza una delgada línea en la cual el lector o el oyente quedan con dudas. Sé que su esposo es un excelente médico oftalmólogo. Entiendo que al fragor de la noticia, como en urgencias, hay muchas variables que, después de hacer un control de años, sirven para reorientar el manejo. Tal como me lo explica, es posible que esto haya sucedido al fragor de la noticia.

Cuando asesinaron a Álvaro Gómez, solo por poner un ejemplo, todos informamos lo que se dijo inicialmente. Que eran los militares. Después se habló de políticos. Y ahora vamos en que fueron las FARC. Así son los casos judiciales de los grandes crímenes: Luis Carlos Galán, Jaime Garzón, en fin. Entiendo la desconfianza en un país tan complejo. Ocurrió porque las familias fueron las primeras fuentes posibles. Y esa fue la información que entregaron. También un senador haitiano de la oposición, Benoit, lo dijo. Afortunadamente hoy a una confesión, y eso es contundente. Pero necesito que me crea. Sé que estamos en un momento en el que nadie cree en nada, todos somos sospechosos.

Sí, señora periodista, todas esas versiones las escuché. Y hoy, la de Semana, a través de Salud Hernández.
Si Salud trabaja conmigo. Somos un equipo de periodistas. Yo la envié a Haití para tratar de conseguir información de primera mano con fuentes de allá.

Ese periodismo en la fuente, en el campo de batalla, es el mejor.

Así es. Pero fíjese que ningún periodista colombiano había viajado. Semana llegó hoy. El periodismo es un oficio difícil, complejo, ingrato a veces. A mí me ha dado muchas alegrías y muchos sinsabores. Pero yo amo esto que hago. Y lo hago siempre con convicción y de manera decente. Las críticas son naturales. Pero su crítica, sin conocerlo, me importó, por eso le escribí y le agradezco inmensamente el escucharme.

Jairo Hernan Ortega - topdoctors.com.co

Ahora que cruzamos ideas e inquietudes se me ocurre, Vicky, que en el periodismo se pudieran aplicar, cómo se hace en medicina, las Listas de Chequeo. Vicky. Hay un libro de un médico estadounidense, Atul Gawande, se llama The Checklist Manifesto. Se basó en todos los controles que hacen los pilotos de aviación antes de emprender su vuelo. Y lo aplicó a los actos, procesos y procedimientos quirúrgicos. Eso ha hecho que se trate con más calidad al paciente y se evitan o disminuyan. los errores ¿Qué tal extrapolando al periodismo?

Eso sería aplicable a cualquier “profesión peligro”. Eso sería lo ideal. Informar, le repito, es complejo, más en tiempos tan agitados. El estar bajo sospecha siempre lo hace más complejo aún. La polarización es brutal. Claro que podríamos ser mejores y tenemos que tratar de lograrlo todos los días. Nos pasa a todos.
Otro procedimiento es el de Control de Daños, donde primero se repara lo vital y se dejan, incluso para días después, otras intervenciones para que, en suma, al final se logre salvar la vida del paciente. Interesante extrapolarlo a ver si se puede aplicar en la noble y valiosa profesión del periodismo, especialmente, cuando se estén expresando noticias en directo. El enfoque es hacer mejor medicina, así como usted quiere, cada día, hacer mejor periodismo. Le agradezco mucho toda su atención y sus respuestas. Me han dado una mejor comprensión sobre esta montaña rusa extrema que hemos vivido en estos días. Así es Colombia.

Doctor le mando un abrazo. Gracias a usted por escucharme ya que no es fácil ser escuchado o, a veces, escuchar. Le repito, no lo conozco, pero admiro su trabajo.

Gracias Vicky. De esta conversación quiero resaltar el amor y la pasión que siente por su profesión y su preocupación por las inquietudes de sus oyentes y lectores. Eso habla de lo gran profesional que es usted. También agradezco, de forma especial, la deferencia que ha tenido para conmigo.

Atul Gawande fue fellow en Cirugía General y Endocrinológica en el Brigham and Women´s Hospital de Boston. Es miembro del grupo de escritores de la revista The New Yorker. Además, es profesor asociado de la Escuela de Medicina de Harvard y de la Escuela de Salud Pública de Harvard. También lidera el programa Salvar Vidas con Cirugías Seguras, de la Organización Mundial de la Salud. Vive en Newton, Massachusetts.

En su libro The Checklist Manifesto (1), Gawande muestra que, tanto en lMedicina como en la vida, a veces, para resolver problemas complejos tan solo se necesita algo tan simple como una lista de chequeo lista de verificación donde debemos tener, por escrito, lo que necesitamos hacer para cumplir un objetivo. Y simplemente se va marcando, punto por punto y paso por paso, si estamos cumpliéndolo para poder llegar a la meta con éxito. Esto permite enfrentarnos a la complejidad de los procesos para superarlos. 

Vicky Dávila - De danilo perdomo CC BY 3.0 commons.wikimedia.org

Entonces, ante determinadas situaciones, en las cuales no se han podido rebasar los escollos, se pueden plantear planes de mejora. Las listas de chequeo van a proveer protección contra errores, nos recuerdan el mínimo de pasos necesarios y los hacen explícitos. En definitiva, ofrecen el tipo de disciplina que se requiere para un alto rendimiento.

Una ventaja de las Checklist es que nos ayudan a focalizar el objetivo porque aparta de la mente todos los aspectos rutinarios para que la productividad sea mayor. Se aconseja que tenga 5 a 9 elementos como máximo para que sea más eficaz y se elabore en un lenguaje sencillo. Deben definirse en qué momento se va a aplicar o usar. Esto nos permite hacer un trabajo con sentido y reconocer el valor de este ayudándonos a crecer personal y profesionalmente, al igual que a nuestro equipo.

En medicina y cirugía esta sencilla y simple lista de chequeo, o de comprobación, elimina errores y salva vidas. ¿Se podrá aplicar en el periodismo para eliminar noticias erradas, tendenciosas o falsas? ¿Permitirá disminuir el impacto de las fake news? ¿Acabará con la especulación y el amarillismo?

Atul Gawande en su libro nos cuenta cómo las listas de chequeo facilitan las actividades del ser humano por muy difíciles que parezcan. Así sea pilotear un sofisticado Jet o construir Interminables y sofisticados rascacielos. Relata cómo en Austria, siguiendo una lista de comprobación, e logró salvar la vida de una niña que había estado en inmersión durante media hora. Y, cómo en Michigan, la comprobación de la higiene, por medio de la lista en las Unidades de Cuidados Intensivos erradicaron las infecciones intrahospitalarias. Basándose en su propia experiencia consiguió, con una lista de comprobación, que se aplicaba en 90 segundos, que redujera el número de fallecimientos y complicaciones, en más de 1/3, en 8 hospitales del mundo, sin que los costos aumentarán y pudiendo aplicarse en cualquier tipo de intervención. Todo se resume a cómo hacer las cosas de manera correcta.

Muchos conocemos lo sucedido en el año 2009 con un avión que amarizó en el río Hudson, después de que una bandada de pájaros impactara una de sus turbinas. El capitán Sully (Chesley Sullenberg), con este forzado y arriesgado amarizaje salvó la vida de la tripulación y de todas las personas que iban en la aeronave. Para esa época el Dr. Gawande estaba construyendo su hipótesis de las listas de chequeo; el accidente aéreo le permitió conocer más a fondo e investigar todos los protocolos que se surtían desde la fabricación de los aviones hasta los que se aplicaban durante los vuelos por los pilotos y la tripulación. Lo que lo motivó a esto fueron las declaraciones del capitán Sully quien le restó méritos a sus heroicas maniobras de salvamento al decir que todo había resultado exitoso debido a la perfecta coordinación de la tripulación y a la correcta aplicación de los protocolos de actuación (checklist).

Los fracasos evitables son frecuentes y persistentes. Estos nos pueden llevar a la desmoralización y la frustración. Pueden ocurrir en muchos campos, desde la medicina, las finanzas, el mundo empresarial y la política, pasando también por el oficio del periodismo. Esto puede estar dado por la infinita cantidad de información y de conocimiento que se surte día a día través de los medios. En el periodismo, poder depurar toda esa información mediática se podría hacer a través de una lista de chequeo. El gran maestro del periodismo, Ryszard Kapuscinski. en su obra Los cinco sentidos del periodista (2), es enfático en afirmar que hace 50 años el periodista era una persona respetada y distinguida en la sociedad. Hoy en día, es un ser anónimo cuyo trabajo no es de su autoría, sino que es el resultado de la labor de un grupo de personas que difunden la información que interesa a los grupos de poder. También afirma que el periodismo es una profesión (como la medicina) en la que no se puede nunca dejar de estudiar pues la actualidad, es la que manda en lo que se tiene que hablar o comunicar. Y lo que antes era una mera fuente de información se ha convertido, hoy, en un instrumento de formación, o deformación, de la opinión pública.
 

Lista de Chequeo para Periodistas

Queda el balón en la cancha del Periodismo para que se anime a elaborar sus propias listas de chequeo en aras de que el objetivo supremo del periodista siga siendo contar lo que pasa a su alrededor de forma objetiva. Termino dejando un ejemplo de Lista de Chequeo para Periodistas: 

BIBLIOGRAFÍA
THE CHECKLIST MANIFESTO. Atul Gawande. Pïcador. 2009
LOS CINCO SENTIDOS DEL PERIODISTA. Ryszard Kapusinscki. Fondo de Cultura Económica. 2003