Consolidamos la solidez financiera
La transacción aprobada por la Honorable Consiliatura fue formalizada el pasado 15 de diciembre de 2025 con la firma de las escrituras entre las partes, por un valor total de $50.800 millones, no representando pérdida alguna para la Universidad, toda vez que dicho monto supera los costos de adquisición y se hizo dentro de los márgenes aceptables de negociación para este tipo de inmuebles conforme los avalúos técnicos. Esta operación permitirá a la Universidad fortalecer su posición financiera, destinando los recursos obtenidos al cumplimiento de compromisos financieros adquiridos con el BBVA y al desarrollo de otras actividades misionales, en coherencia con una política de administración prudente, transparente y orientada al largo plazo.
Esta decisión hace parte de una estrategia integral de optimización de activos improductivos y fortalecimiento institucional, orientada a asegurar la estabilidad financiera de la Universidad y a consolidar su capacidad para continuar invirtiendo en docencia, investigación y extensión.
Esta operación permitirá a la Universidad un ahorro aproximado a valor presente de $24.720 millones en intereses durante los próximos ocho años, frente a la obligación financiera vigente y un ahorro anual estimado de $1.000 millones en gastos de operación.
Normalidad académica y continuidad de servicios para la comunidad rosarista
Es importante señalar que las actividades académicas y los servicios que actualmente operan en el edificio continuarán desarrollándose con normalidad “En particular, el Laboratorio de Simulación Médica y Clínica, uno de los servicios estratégicos de la Universidad, será trasladado a la Quinta de Mutis, garantizando plenamente la continuidad de la operación, así como la calidad y seguridad en la prestación del servicio”
Así lo indicó Miguel Diago Arbeláez, síndico de la Universidad.
Además, aclaró que todos los programas de maestría del GSB y el resto de las actividades de docencia que allí se imparten se mantendrán en el quinto piso del mismo edificio, dado que
“(…) hemos acordado con el Ministerio de Defensa Nacional un contrato de arrendamiento, lo cual nos permite que todas las actividades misionales que allí se desarrollan sigan con absoluta normalidad”.
Con esta operación, la Universidad del Rosario reafirma su compromiso con una gestión eficiente de los recursos, la toma de decisiones estratégicas oportunas y la construcción de un futuro institucional sólido y sostenible.
“Lo más importante es que tengan claro que la Universidad va a continuar fortaleciendo los servicios misionales, y nos alegra consolidar una excelente relación con la Armada Nacional, con quienes vamos a convivir en estos espacios”, puntualizó el Síndico.