Este número de la Revista Nova et Vetera estará dedicado al emprendimiento. Esta actividad ha ganado reconocimiento como fuerza impulsora del crecimiento económico, innovación y cambio social. De hecho, en la actualidad se considera un campo de estudio respetado y reconocido el cual se define como el proceso de descubrir, desarrollar y explotar oportunidades para crear nuevos bienes y servicios. Gradualmente, ha ganado protagonismo debido a su importante impacto en el crecimiento económico, la creación de empleo y la mejora de la competitividad y productividad.

Igualmente, la tecnología ha tomado un papel fundamental y protagónico en el emprendimiento al brindar herramientas y plataformas que facilitan la creación y escalamiento de nuevos negocios. Para seguir impulsando el espíritu emprendedor, es necesario promover una cultura y educación de emprendimiento; brindar apoyo, oportunidades y establecer alianzas entre los sectores público y privado.

Por lo anterior, dedicamos este espacio para abordar las nuevas políticas de emprendimiento en Colombia, su desarrollo en las regiones, la importancia del emprendimiento social y el impacto del Centro de Emprendimiento de la Universidad del Rosario para el ecosistema emprendedor. También se aborda el contexto de la crisis provocada por la pandemia del Covid-19 en Colombia, y el impacto del emprendimiento como una forma de enfrentar la crisis económica y generar oportunidades laborales. Se destacan a las mujeres emprendedoras y la importancia de la Ley 2125 de 2021, que establece incentivos a los emprendimientos liderados por mujeres.

Además, se resaltan los obstáculos en el ecosistema emprendedor como la falta de habilidades necesarias para emprender, la dificultad para acceder a financiación y las limitaciones de comercialización e innovación. Si bien se han establecido nuevos negocios, se enfatiza la necesidad de asegurar su sostenibilidad a través de la modernización, la inversión extranjera y la capacitación. 

Por otra parte, Colombia tiene el potencial de convertirse en un centro de emprendimiento para promover el desarrollo regional. No obstante, se destaca la necesidad de tener un enfoque territorial para aprovechar completamente este potencial, un ejemplo de ello es la concentración de startups en Bogotá y Antioquia. Sectores estratégicos como el turismo y la agricultura han demostrado ser un foco de oportunidad para impulsar el desarrollo regional a través del emprendimiento. 

La colaboración entre el Estado, la academia, el sector privado y la sociedad civil es fundamental para impulsar los emprendimientos que transforman las regiones y generan innovaciones para el bien común. El emprendimiento en Colombia ha experimentado un auge significativo, destacándose en varios sectores clave y contribuyendo al crecimiento económico. Según el "Monitor Global de Emprendimiento", Colombia es uno de los países de América Latina con mayor actividad emprendedora y se encuentra en el puesto 45 a nivel mundial en el Índice Global de Emprendimiento y Desarrollo. El país cuenta con una ubicación estratégica, recursos naturales y talento joven, lo que augura un futuro prometedor para el ecosistema emprendedor.

Desde otra perspectiva, se destaca cómo la responsabilidad social juega un papel fundamental en los emprendimientos. La experiencia compartida por una estudiante de Jurisprudencia de la Universidad del Rosario, Sara Ariza, con su emprendimiento Lumière, enfatiza que los emprendimientos con un propósito social y ambiental tienen más probabilidades de crecer y tener un impacto duradero.

Finalmente, se describe cómo el Centro de Emprendimiento de la Universidad del Rosario ha sido un actor destacado en el fomento del emprendimiento desde 2010, brindando apoyo integral a proyectos y emprendimientos. Además, se narra cómo se ha transversalizado el emprendimiento en la Universidad, estableciendo alianzas nacionales e internacionales. 

En conclusión, impulsar el emprendimiento en Colombia requiere enfrentar desafíos y capitalizar el potencial del país en sectores estratégicos para el desarrollo regional. La clave para el éxito radica en la colaboración entre diversos actores, ya que permite generar innovación y promover cambios que brinden valor a la sociedad. El emprendimiento, como fuerza transformadora, tiene el poder de cambiar vidas, entornos y contribuir significativamente a un futuro prometedor y sostenible. Al tener esta visión emprendedora podremos consolidar a Colombia como un verdadero centro de emprendimiento y abrir paso a un panorama con más de oportunidades y crecimiento.