08 de abril 2022
El Grupo de estudios interdisciplinares en dinámicas socioambientales -Grupo Mutis- participó en la mesa de Género, interseccionalidad y prácticas que hacen mundos en el marco del seminario en Ecología Política Haciendo Mundos: naturaleza, tecnologías y futuros; organizado por la Universidad de Bristol, la Universidad EAN, la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Colombia y el Grupo Mutis- de la Universidad del Rosario.
Por: Maria Camila Agudelo
Ante la inminente pérdida de biodiversidad y extinción de especies, han surgido nuevas organizaciones y modelos de conservación que no han logrado detener la
pérdida de ecosistemas y biodiversidad. Por el contrario, esta “globalización de la conservación” ha dado lugar, en algunos casos, a nuevos conflictos y disputas en los territorios pues muchas veces se imponen violentamente y en contravía de las concepciones indígenas, afrodescendientes, campesinas, en general, de las poblaciones locales. Los pueblos y comunidades del sur global, que se enfrentan al extractivismo y a la lógica de la explotación, han planteado una
defensa territorial que incluye a los no humanos, es decir a otros animales, ríos, montañas, y otras relaciones que van más allá de los “fáciles binarios”.
En el marco de esta discusión, tuvo lugar el pasado 23 y 24 de marzo el seminario Haciendo Mundos: naturaleza, tecnologías y futuros, organizado por Bioresilience-Sociocultural de la Universidad de Bristol, la Rectoría de la Universidad EAN, la Facultad de Ciencias Humanas-Universidad Nacional de Colombia y Grupo Mutis de la Universidad del Rosario. “Consideramos que la lucha de los indígenas y otros no-modernos es una lucha fundamentalmente política y precisamente, en este seminario, sugerimos que esta lucha política no solo es inherentemente de resistencia a los proyectos extractivistas y coloniales, sino que también es la manifestación de
otras formas de ser y hacer el mundo” subrayan expertas y expertos del seminario, quienes coinciden además en que, estas otras formas de ver, vivir y habitar el mundo, son fundamentalmente luchas ontológicas.
- Nuevas narrativas digitales con enfoque pedagógico: Serie web ReConectando
Ana Maria Aldana, bióloga y profesora del Grupo Mutis de la Universidad del Rosario, presentó un fragmento de la primera serie web Rosarista ReConectando “una serie que creamos de manera que se juntaran dos mundos: el mundo de los jóvenes urbanos que de alguna manera han perdido su
conexión con la naturaleza y el mundo de los campesinos y las comunidades rurales que viven en la naturaleza y tienen
prácticas de cuidado” afirma Aldana, quien también señala que la página donde se encuentra la serie - www.reconectando.urosario.edu.co- es un recurso pedagógico porque contiene la
narrativa audiovisual, imágenes, documentos pdf y 3 vídeos donde personas de la comunidad local comparten sus conocimientos sobre los suelos, el bosque y el agua.
Esta serie nos invita a “pensar en la política, lo que implica hacerla, y lo que hacemos para producir ciencia no solo desde términos académicos sino también en estos productos de
apropiación social del conocimiento” concluye Aldana, quien motiva a las personas a aventurarse a este otro tipo de formatos que permiten que el público no especializado acceda a los resultados de nuestras investigaciones y la ciencia se haga más
democrática y participativa.
- Liderazgo y empoderamiento de las mujeres
Clemencia Herrera, líderesa indígena que ha trabajado con mujeres en la OPIAC - Organización Nacional de los Pueblos Indígenas de la Amazonía Colombiana- y la ONIC -Organización Nacional Indígena de Colombia-, compartió su experiencia y sus reflexiones en el liderazgo y
empoderamiento de las mujeres: “el rol que cumplimos las mujeres para el cuidado de la naturaleza, el territorio, el monte, lo que hoy llaman el bosque, lo hacemos colectivamente y con el fin de compartir ese conocimiento para el cuidado de la misma gente” Clemencia, conecta este rol de “cuidado”, que generalmente han asumido las mujeres, como una forma de gobernabilidad dentro de los territorios, pues señala que “cada una somos líderes desde los diferentes espacios, desde los espacios que conocemos, yo formo lideres jóvenes y hay que formarlos como
defensores del territorio de la vida, de los derechos humanos, también jóvenes hombres para concientizarlos”. Para ella, la formación debe ir de la mano de
prácticas y conocimientos, con experiencias como la agricultura urbana con mujeres que han sido desplazadas del conflicto a Bogotá, con emprendimientos como el Restaurante de Comidas Amazónicas, con espacios de artesanías y muchas más experiencias de mujeres sembradoras, que hablan desde el territorio, con un enfoque de soberanía alimentaria y con el propósito de que puedan
sostenerse y sobrevivir desde otras formas.
Por último, Clemencia se despide no sin antes compartir una reflexión que es fundamental para su comunidad y que viene de su propia experiencia y camino: la chagra que es “el centro de
biodiversidad más grande del mundo, la pervivencia de los pueblos indígenas; porque quien no tiene una chagra puede morir sencillamente porque no tiene semillas que cultivar.”
- Otras formas de ser mujer amazónica: experiencia de gobernanza ambiental
Juliana Sánchez Castellanos, antropóloga líder del componente de género en el proyecto de participación política de la Fundación Gaia Amazonas, nos habla de cómo se piensa el
activismo, la voz y lugar de las mujeres indígenas. Un lugar que ella denomina conflictivo y desafiante, pues no es tan evidente que ellas puedan apropiarse y tomar decisiones y
participar y hacer política. “Hemos implementado un enfoque de género situado para fortalecer la participación de las mujeres. En los últimos 6 años nos hemos esforzado en preguntarnos con ellas qué es la política, lo político y hacer un
diálogo intercultural y realmente incidir bajo esta construcción de lo político desde lo local” afirma Juliana.
El rol político y de
gobernanza de las mujeres, en este contexto, está atado a sus conocimientos ancestrales y tradicionales, como la alfarería, el cuidado de los niños, el manejo de la menstruación; pero también a “otras” formas de ser mujer como las redes de solidaridad, el liderazgo, la escolaridad no occidental. Es decir, que no hay una sola forma de ser mujer amazónica. Juliana destaca también, que estos conocimientos como el cuidado de la chagra, la comunicación con otros seres, con los animales, las plantas y los alimentos establecen conexiones y diálogos complementarios.
En ese sentido, ellas tienen un lugar de enunciación desde lo propio, construyen identidades individuales, pero también colectivas; inciden en procesos de gobernanza,
agencia política, en el manejo de los sistemas alimentarios y en el liderazgo desde lo ambiental. “Lo que hacen estas mujeres es una
apuesta de reivindicación, pero también performática porque la llevan a cabo e incluyen a los otros seres. Lo hacen desde sus conocimientos, la chagra, la sangre menstrual, la semilla, sangre de parto” afirma Juliana, quien concluye su intervención con la exigencia de estas mujeres luego de años de intercambio de saberes “las mujeres están movilizando sus cuerpos y conocimientos para exigirle a sus compañeros y al estado mismo para que las incluya en un diálogo de saberes,
incluyéndolas no solo a ellas sino a otros seres, a ese tigre, danta, planta”.
- Reescritura del pasado colonial: Laboratorio de Experimentación en Ciencias Sociales SensoLab
El Laboratorio de Experimentación en Ciencias Sociales de la Universidad Javeriana, SensoLab, nos compartió su experiencia con “el Herbario de la catástrofe” una apuesta por destacar lo problemático de exposiciones escenográficas, naturales, artísticas, o culturales. Para los creadores de SensoLab “las exposiciones se componen de cosas que han sido colectadas y al hacerse coleccionables, cada espécimen o artefacto se ha producido como un objeto que indexa una
voluntad científica de conocimiento; esta voluntad de conocimiento es tanto epistemológica como institucional y muchas veces es una forma de
violencia normal de la que hay que dar cuenta para
decolonizar y economizar las colecciones”.
La apuesta es llegar a un ejercicio reflexivo y crítico del proceso histórico que conllevan esos objetos coleccionables o que se exhiben en estos espacios, en palabras del colectivo SensoLab “negociar con los diversos
modos violentos a través de los cuales se produjo el coleccionismo científico, a partir de un ejercicio de
reescritura del pasado colonial”.
- Conclusiones Mesa de Género, Interseccionalidad y Prácticas que hacen Mundos
Astrid Ulloa, antropóloga, feminista, geógrafa, profesora de la Universidad Nacional, fue la moderadora de esta mesa y quien nos dejó algunas anotaciones y reflexiones:
1. La situación de las mujeres en estos contextos de extractivismo donde hay
relaciones desiguales de poder
2. Cómo ellas mismas, las mujeres, plantean otro tipo de relaciones desde diferentes miradas y desde otros lenguajes que articulan una
interseccionalidad entre jóvenes, mujeres e indígenas.
3. El cuerpo y el territorio de estas mujeres está inmerso en todas las dinámicas, es decir, sus relaciones se
territorializan y son colectivas, pues se dan desde la complementariedad y están
acompañadas de otros seres, de las plantas, de animales, de sus chagras.
4. Cada día hay más explotación, extrativismos, despojos y debemos encontrar
otros lenguajes y otras formas de pronunciarnos. En las mujeres indígenas encontramos otras formas.
5. Des-centrarnos y empezar a sentir y sumergirnos en los
sentires en los territorios y en los seres. Es una apuesta ¿cómo hacemos para acercarnos y ver otras metodologías?
6. ¿Cuáles serían las transformaciones ambientales socio- culturales y estéticas que se requieren frente a la
exacerbación del exepcionismo humano?
Reviva esta conferencia aquí:
https://www.youtube.com/watch?v=-TZ5nJTwtRY
Para más información sobre este seminario escribir a los correos
Naomi Millner:
Naomi.Millner@bristol.ac.uk
Mónica Amador-Jimenez:
monica.amadorjimenez@bristol.ac.uk